Episodio surrealista en Alemania con el jugador del Bayern Múnich, Thomas Müller, y su mujer Lisa, los cuales han sido acusados de crueldad animal por la organización PETA (personas por el trato ético de los animales). Según esta organización ambos han obligado a sus caballos a tener "actos sexuales antinaturales" para obtener beneficio económico.
Müller y su esposa Lisa habrían buscado obtener dosis de semen de caballo que vendían congelado por una media de 200 euros la dosis a través de esas prácticas antinaturales. Todo esto viene, según informa el diario británico Daily Mail, tras la lesión de uno de sus caballos, D’Avie, que fue comprado en 2020 y que "desafortunadamente se resbaló durante un intento de prueba para prepararse para la temporada de reproducción".
"Sufrió una lesión en los cascos y necesitará descanso completo durante los próximos meses. Es un tipo duro y podría haber sido peor", comentó Muller en un comunicado. Este hecho encontró respuesta por parte de Jana Hoger, portavos de PETA: "Es horrible que obliguen a los caballos a realizar actos sexuales antinaturales para beneficiarse de ellos. Las lesiones que sufrió D'Avie bajo la supervisión de Lisa y Thomas Müller fueron prevenibles e innecesarias. Es horrible que los autoproclamados amantes de los caballos obliguen a los animales bajo su cuidado a realizar actos sexuales antinaturales para beneficiarse de ellos".
En Alemania no dan crédito a lo que está sucediendo alrededor de la estrella del Bayern de Múnich, que de momento no ha querido pronunciarse sobre esta denuncia.