Kylian Mbappé se encuentra este lunes en Madrid comiendo en un famoso restaurante de la capital junto a Achraf Hakimi, compañero suyo en el París Saint-Germain. Así lo ha asegurado la Cadena COPE, añadiendo que el delantero francés llegó al restaurante con gorra negra, gafas de sol, chaqueta vaquera, camiseta blanca y pantalón negro.
Mbappé y sus compañeros tienen días de descanso tienen descanso hasta el miércoles, día en el que el PSG retomará los entrenamientos tras el empate en el Parque de los Príncipes contra el Troyes (2-2).
Según algunos medios, el Real Madrid ultima con los representantes de Mbappé el contrato definitivo del jugador. La clave de la negociación entre la familia y agentes de Kylian y los pesos pesados de la directiva blanca está en la cesión de los derechos de imagen del jugador.
En el Madrid estarían dispuestos a hacer un gran esfuerzo —como en su día con Cristiano Ronaldo— y cederle a Mbappé más de la mitad de sus derechos, pero siempre dejando a un lado los derechos por la venta de camisetas.
Además, la última oferta que tiene Mbappé del Real Madrid incluye una prima de fichaje de 180 millones de euros, que es la misma cantidad que el PSG rechazó el pasado verano del club madridista para traspasarle.
El sueldo del delantero francés se iría a los 40 millones de euros netos anuales, convirtiéndose de lejos en el jugador mejor pagado de la plantilla madridista. En este sentido, cabe destacar que ahora mismo el jugador del Madrid que más gana es Gareth Bale, con un salario de 12 millones netos al año.
Mbappé se mantiene en silencio y no hablará en público hasta tener atado su futuro que, esta vez sí, parece estar en el Real Madrid.
Mientras tanto, el PSG también mueve sus hilos y está realizando algunos intentos desesperados por renovar a Kylian. Según informó Le Parisien la semana pasada, el club galo le ofrece un total de 200 millones de euros (50 millones netos por temporada, más una prima de renovación de 100 millones) y la totalidad de sus derechos de imagen por jugar las dos próximas campañas en París.
Los agentes de Mbappé se lo piensan, pero la última palabra es del futbolista.