El Betis aseguró este jueves en su visita al Ludogorets búlgaro su pase a los octavos de final de la Europa League. Los andaluces necesitaban un punto para certificar la clasificación directa, pero lo logró con una victoria por 0-1 con un gol del francés Nabil Fekir en la segunda parte.
El equipo español se vio superado en la primera mitad por el conjunto búlgaro, que desaprovechó varias ocasiones para adelantarse, pero en la segunda se le fueron las ideas y el físico con el paso de los minutos y la acción de Fekir los dejó muy tocados. Aunque no todo fue felicidad en el conjunto sevillano, ya que se tuvieron que retirar antes de tiempo por lesión Joaquín y Guido Rodríguez.
El equipo andaluz viajó a Bulgaria con la clara y única intención de dejar cerrada matemáticamente su primera plaza del grupo y que el partido del próximo jueves en el estadio Benito Villamarín ante el HJK Helsinki ya fuera un verdadero trámite deportivo.
Con el pase decidido a la siguiente fase del torneo desde la pasada jornada con el empate a uno registrado en Sevilla ante el Roma, el premio de ser primero era importante porque así pasaba directamente a los octavos de final y evitaba una eliminatoria previa frente a un rival rebotado de la Champions League.
El punto valía para ello, pero el entrenador verdiblanco, Manuel Pellegrini, ya avisó en la víspera del encuentro que salir a empatar era la mejor manera de perder, y más ante un equipo que se muestra intratable en los últimos años en la liga doméstica, y que además, le complicó mucho las cosas a la formación andaluza en el partido que se disputó en el Villamarín, el cual acabó con un 3-2 favorable al Betis.
Las intenciones del conjunto que entrena el esloveno Ante Simundza se vieron pronto, muy físico y con velocidad en los contragolpes, como se mostró desde los primeros minutos con remates del brasileño Jhonatan Lima 'Richk' o de su compatriota Cauly Olivera, este en dos ocasiones. El meta chileno Claudio Bravo tuvo que estar activado desde el arranque ante un rival que ya había ganado como local en esta fase a la Roma del portugués José Mourinho.
La falta de puntería del conjunto búlgaro hizo que el partido se fuera al descanso con el empate inicial. Pellegrini dio entrada desde el inicio de la segunda parte a dos jugadores de peso, Álex Moreno y Fekir, con la idea de que el Betis tuviera fuera más protagonista de lo que se había visto en la primera.
Fue el jugador francés el que acertó con la portería poco antes de que se cumpliera el primer cuarto de hora de la reanudación, en la primera jugada en la que los visitantes tiraron entre los tres palos. Los locales reclamaron fuera de juego, pero Fekir estaba en posición correcta al quedarse enganchado por delante del meta neerlandés Sergio Padt y deel defensa noruego Aslak Fonn Witry.
El 0-1 cambió el rumbo del partido porque los visitantes se encontraron a un adversario más precipitado en busca de la meta y ello propició errores que los béticos intentaron aprovechar con más espacios para cerrar la victoria con otro tanto, pero el gol no llegó y el encuentro finalizó con el solitario gol del equipo andaluz.
- Ficha técnica:
0 - Ludogorets: Padt; Cicinho, Verdon, Nedyalkov, Witry (Gropper, m.84); Piotrowski (Nonato, m.74), Cauly, Naressi (Gonçalves, m.84); Rick (Delev, m.74), Thiago (Tissera, m.65) y Tekpetey.
1 - Betis: Claudio Bravo; Aitor Ruibal, Édgar, Víctor Ruiz, Miranda (Álex Moreno, m.46); Paul Akouokou (Fekir, m.46), Guido Rodríguez (Enrique Fernández, m.73); Joaquín (Luiz Henrique, m.27), Canales, Rodri; y Willian José (Borja Iglesias, m.83).
Gol: 0-1, M.56: Fekir.
Árbitro: Harald Lechner (Austria). Amonestó al visitante Paul (m.08) y a los locales Thiago (m.38) y Verdon (m.45).
Incidencias: Partido de la quinta jornada en el grupo C de la Liga Europa disputado en el Huvepharma Arena de la localidad búlgara de Razgrad. Asistieron cerca de once mil espectadores que casi llenaron el estadio.