El Atlético de Madrid está en una situación límite en esta temporada. Los colchoneros llevan dos semanas en las que el equipo no gana en Liga y ha sido eliminado de las competiciones europeas. Además, estos fracasos conllevan consecuencias económicas. Como ya se pudo comprobar en verano, Enrique Cerezo y Gil Marín tuvieron problemas para poder realizar fichajes.
El primer revés llegó con el empate en Champions ante el Bayer Leverkusen, ya que ese resultado los dejaba sin opciones de pasar a octavos de la máxima competición europea. El segundo varapalo fue la derrota ante el Oporto el pasado martes, que junto al empate de los alemanes ante el Brujas, consumaba el fracaso de los del Cholo Simeone, que se quedaban también sin plaza en Europa League.
Estamos a inicios de noviembre y el Atleti se ha quedado sin competiciones europeas. Solamente le quedan la Liga Santander y Copa del Rey para enderezar la temporada, pero en el campeonato doméstico tampoco están siendo regulares. Se encuentran a 9 puntos del líder, el Real Madrid, por lo que se antoja complicado que puedan competir por ganar el título de Liga.
Además, equipos como el Betis, Real Sociedad y Athletic, están luchando por entrar en puestos Champions, por lo que los de Simeone no tienen una plaza asegurada de disputar la máxima competición europea la temporada que viene. La irregularidad del Atlético en esta campaña asusta, porque de 18 partidos disputados hasta la fecha, sólo han ganado 8.
Por todo esto, de lo que más se está hablando es si Simeone debe acabar la temporada en el banquillo colchonero o si las altas esferas tienen que buscar un sustituto. En los últimos días ha sonado el nombre de Luis Enrique. Precisamente, la cúpula directiva ha hecho acto de presencia en el entrenamiento de este viernes.
En primer lugar, ha habido toque de atención de Gil Marín tanto al cuerpo técnico como a la plantilla de cara a las tres jornadas de liga que quedan antes del parón por el Mundial. La derrota en la última fecha liguera disputada frente al Cádiz en el minuto 98, hizo mucho daño en el entorno de los rojiblancos.
Ha bajado al vestuario junto a Antonio Alonso, vicepresidente del club, para expresarles las las consecuencias económicas que tiene esta eliminación de Europa. Además, ha pedido autocrítica a jugadores y entrenadores del equipo colchonero. También, ha mandado un mensaje de unidad, en el que ha comentado que tienen que ir todos en la misma dirección si quieren revertir la situación actual.
No fue solamente lo único con lo que tuvieron que lidiar jugadores y cuerpo técnico en la mañana de hoy, ya que el entrenamiento estuvo marcado por una pancarta del Frente Atlético en el campo dónde se iban a ejercitar los del Cholo. El mensaje enviado fue "la afición al frente de un Atleti digno."
La situación es límite en el Atlético de Madrid y necesitan darle la vuelta para que no acabe siendo la peor temporada con Simeone al frente del club.