Florentino Pérez no acudirá al palco de un Clásico por primera vez desde que es presidente del Real Madrid. El máximo mandatario del club blanco ha decidido no viajar a la ciudad condal tras una semana muy convulsa por el caso Negreira.
La Fiscalía se querelló contra el Barcelona al comienzo de la semana, y el Real Madrid comunicó que se personará en el caso como acusación particular. La acción del club madrileño, que hasta ese momento no se había pronunciado al respecto, provocó un enfado monumental en el Barça, socio principal de Florentino en la Superliga.
Joan Laporta ha hablado en varias ocasiones durante la semana dejando caer varias indirectas en relación con el Madrid: "Ahora ya estamos todos". El presidente del Barça había desconvocado la habitual comida entre directivas previa al Clásico, y finalmente ha sido Florentino el que ha decidido plantar al club azulgrana. El dirigente considera que el recibimiento en Barcelona habría sido muy hostil.
Laporta ha encendido la previa con algunas intervenciones en los medios: "Nos defenderemos y atacaremos. La campaña que estamos sufriendo no es casualidad. Tendré tiempo para explicaros quién, por qué y cómo quieren orquestar esta campaña para desestabilizar al club y quedárselo".
Todo esto sucede en la semana en que Libertad Digital publicó en exclusiva los informes arbitrales que redactaba Enríquez Negreira para el Barça, y por los que el club catalán pagó cantidades millonarias.