Camavinga se exhibe con Francia y Deschamps cambia de opinión: "Es un gran mediocentro"

Eduardo Camavinga ha sido una de las grandes sorpresas de Francia en los dos primeros partidos de los galos en su camino hacia la Eurocopa de 2024. Didier Deschamps aseguró que el futbolista del Real Madrid iba a la selección para jugar de lateral izquierdo, pero ha terminado por convencer al técnico jugando de mediocentro. Ante Irlanda, el centrocampista se exhibió en la posición en la que se ha terminado por consolidar en su club: como pivote único por delante de la defensa.

"Camavinga es el jugador que más garantías me da para jugar de lateral izquierdo", aseguró Deschamps hace una semana al dar a conocer la lista de convocados para los enfrentamientos ante Holanda e Irlanda. Unas palabras que sorprendieron a propios y a extraños teniendo en cuenta el nivel mostrado por el ex del Rennes jugando de mediocentro en los últimos meses. En cuestión de minutos ante Holanda, Camavinga hizo cambiar de parecer a Deschamps.

Tal y como ha sucedido en el Madrid, el joven mediocentro le ganó la partida a Tchouaméni para el encuentro frente a Irlanda. Deschamps cambió de esquema y alineó a Camavinga como único pivote. Sus buenos minutos ante Holanda no fueron un espejismo y contra Irlanda completó uno de sus mejores partidos como internacional. Francia ganó 0-1 con sufrimiento en Dublín, pero el ‘12’ del Madrid se reivindicó como mediocentro.

"Que pueda jugar de lateral no significa que no lo pueda hacer de mediocentro. Ante todo, Camavinga es centrocampista. Está con confianza, está teniendo mucha actividad en su club y puede recuperar muchos balones. Ha hecho un gran partido, pero sigue siendo una buena alternativa para la izquierda". El lateral zurdo de Francia en estos dos partidos ha sido Théo Hernández. El defensa del Milan hizo un gran Mundial y, tras la lesión de su hermano Lucas, se ha ganado la confianza del seleccionador.

A pesar de que Camavinga cumplió con creces en el Mundial cuando Deschamps lo puso de lateral, el jugador ha demostrado en el Madrid, y ahora en la selección, que donde mejor rinde es de mediocentro. Tan sólo le faltaba continuidad para asentarse en una de las posiciones más complicadas que hay y en las que más madurez se necesita. Camavinga ha aprovechado los continuos problemas musculares de Tchouaméni para ser un fijo de Ancelotti en la medular. De hecho, en el Bernabéu ya se vuelve a hablar de la CMK: Camavinga ha sustituido a Casemiro para escoltar a Modric y a Kroos en un centro del campo que ilusiona al madridismo con vistas a la recta final de la Champions.