Hoy, 14 de abril, se celebra en todo el planeta el denominado ‘Día Internacional del Portero’. Una celebración reciente, y que cada año toma más impulso con distintas celebraciones y actos en homenaje a la que probablemente sea la figura más particular en el mundo del fútbol.
Pero, ¿por qué hoy? ¿Por qué el 14 de abril? En Miguel Calero, y en su historia, radican la causa.
El portero amado
Miguel Ángel Calero Rodríguez nacía en Ginebra, Colombia, el 14 de abril de 1971. Su vida siempre transcurrió bajo palos, desde el Real Independiente de su ciudad natal, donde comenzó a jugar. Fue en la Escuela de Fútbol Carlos Sarmiento Lora donde terminó de formarse, y donde coincidiría con otras futuras estrellas de la portería colombiana como Faryd Mondragón y Óscar Córdoba.
Sporting de Barranquilla sería su primer club profesional, aunque sería en el Deportivo Cali donde dejaría mayor poso. Allí llegaría para sustituir a otro guardameta icónico, el boliviano Carlos Trucco.
No tardó en convertirse en el ídolo de la afición. Tanto por sus paradas, como por sus excéntricas salidas con los pies, al más puro estilo sudamericano de la época. Pero sobre todo fue con la consecución del título nacional de 1996 cuando Calero se convirtió en un ídolo eterno del Deportivo Cali.
Al año siguiente firmaría por el Atlético Nacional, en lo que suponía el fichaje más caro de la historia en el fútbol colombiano (1.200.000€).
Continuó con su buen hacer, ganando un nuevo título liguero, y aquello le permitió dar el salto al fútbol mexicano, mucho más suculento en lo que a sueldos se refiere. Tuvo la oportunidad de cruzar el charco y desembarcar en el fútbol europeo, pero la oferta de Pachuca fue irrechazable.
Once años se mantuvo en la portería de los tuzos, en los que consiguió cuatro campeonatos nacionales, cuatro Copa de Campeones de la CONCACAF (la Champions de Centroamérica), y una Copa Sudamericana, el único título del continente en la historia del fútbol mexicano.
No es de extrañar que Miguel Calero sea, además de en Colombia, todo un ídolo en México.
También con la selección vivió grandes éxitos, aunque siempre a la sombra de Óscar Córdoba. Llegaría a disputar 48 encuentros con Colombia, siendo convocado en un Mundial y seis Copa América, destacando la de 2001, en la que Colombia salió campeón. Miguel Calero jugó el tercer partido, contribuyendo a que su equipo sea el único que se ha proclamado campeón sin recibir ningún tanto en toda la competición.
Una muerte prematura
Su retirada llegó en septiembre de 2011, y sólo un año más tarde, el 4 de diciembre de 2012, fallecía en el hospital. Un infarto cerebral provocado por una embolia dos semanas antes terminaría con su vida. Tenía 41 años.
Los actos en su honor se sucedieron, en Colombia y en México. Y de manera inmediata se puso en marcha una campaña, liderada por la marca de guantes Rinat, para declarar el 14 de abril, el día de su nacimiento, como el Día Internacional del Portero.
Así se viene reconociendo desde 2013, en recuerdo a un guardameta profundamente querido y amado en México y Colombia, y en homenaje a todos aquellos que, en un campo de fútbol, tienen la misión de impedir aquello con lo que todos los demás sueñan.
Feliz día del portero.