
España se ha estrenado como campeón de Europa con empate a cero en Belgrado ante una Serbia mermada en ataque pero muy seria en líneas defensivas.
La selección de Dragan Stojković, pitado por el mal rendimiento de su equipo en la Eurocopa de Alemania, ha completado un partido notable frente a la vigente campeona de la Nations League. En la primera parte España se ha visto con dificultades claras para encarar, tanto por la banda de Nico Williams como por la de Lamine Yamal, y con sobresaltos para defender las transiciones rápidas de los serbios en las contras. Tanto ha sido así que la ocasión más clara de la primera mitad y del partido, la ha tenido Serbia, en las botas de Luka Jovic. El ex madridista se ha encontrado un balón muerto en el área y cuando solo tenía que ponerla entre los palos, con David Raya casi abatido, la ha mandado fuera.
🤯Es difícil de explicar lo que acaba de fallar Serbia
Juzguen ustedes mismos el error de Luka Jovic#UNL #SelecciónRTVE
📺https://t.co/O2FsvPHSM2 pic.twitter.com/Wa0vgmyxDI
— Teledeporte (@teledeporte) September 5, 2024
La segunda parte ha cambiado ligeramente la película. España ha ido encerrando poco a poco a la selección local en su campo pero aunque en este caso los desbordes se llevaban a cabo, el último pase siempre acababa en los pies de los centrales, que han estado muy concentrados durante todo el partido. Serbia apenas a podido ejecutar ninguna contra en la segunda mitad del partido a causa de la buena presión tras perdida de los de Luis de la Fuente, que pese a no haber marcado ha completado un buen partido en un estadio difícil.
Los últimos minutos han sido un acoso y derribo por parte de España, que aunque no sacaba disparos limpios, si conectaban esos balones colgados al área que en al principio no llegaban a culminar. Más aún con la entrada de Joselu Mato, que nada más entrar en el minuto 82, a estado a punto de hacer el gol a la salida de un córner.
Un protagonista del partido, sin duda, ha sido el árbitro, el neerlandés Serdar Gözübüyük, que ha terminado el partido habiendo enseñado hasta ocho tarjetas amarillas, más una a De la Fuente. Visto esto pensaríamos que ha sido un partido bronco, pero realmente, no ha ido más allá de la necesaria intensidad en un partido de fase de grupos.
El próximo partido de la Selección Española será el día 8 de septiembre contra el combinado suizo a las 20:45, partido que se espera complicado ante una siempre vistosa Suiza.