Los partidos de clasificación para el Mundial en Sudamérica han tenido un cóctel explosivo. Desde un nuevo batacazo terrible de Brasil en Paraguay, perdieron 1-0 -con Vinicius, Rodrygo y Endrick jugando de inicio- al gran partido que firmó la Colombia de James frente a Argentina, derrotando a los actuales campeones del Mundo y de la Copa América por 2-1 con gol y asistencia del flamante nuevo fichaje del Rayo Vallecano, a un partido que trae cola. Bolivia, gran revelación en esta fase de clasificación, asaltó Chile (ganó 1-2) en un partido lleno de polémica que está dando la vuelta al mundo.
En un lance del partido entre Chile y Bolivia, el guardameta visitante, Carlos Emilio Lampe, recibió un balón de su defensa cuando los bolivianos vencían por 0-1. Lampe cayó fulminado sin que pudiera tocar la pelota, debido a una fractura del tendón de Aquiles, pero el delantero chileno Eduardo Vargas persiguió el balón y marcó a puerta vacía, sin ninguna oposición, para anotar el empate a uno. Inmediatamente después, como si el karma interviniera, Posteriormente, Bolivia marcó el 1-2, resultado que se mantuvo hasta el final del choque. Lampe será operado este miércoles tras sufrir una "ruptura total del tendón de Aquiles derecho".
La acción se produjo cuando el portero boliviano recibió el balón de un compañero al borde del área, lo controló y cuando se disponía a pegar en largo sufrió un ligero resbalón y quedó tendido en el césped. Pese a que el meta levantó la mano en señal de que se había lesionado, Vargas, que se disponía a presionar ligeramente para interrumpir la acción, aprovechó para llevarse el esférico y marcar a placer a puerta cerrada.
Vargas marca para Chile tras caer lesionado Carlos Lampe, el guardameta boliviano.#EliminatoriasSudamericanas #LaCasaDelFútbol pic.twitter.com/T3uaYAbhEy
— Fútbol en Movistar Plus+ (@MovistarFutbol) September 10, 2024
El colegiado paraguayo Juan Gabriel Benítez validó el tanto y los jugadores bolivianos no dudaron en afear al atacante chileno su acción y reclamarle falta de juego limpio, mientras los compañeros de Vargas lo defendían camino del centro del campo.
Lampe tuvo que salir en camilla sin poder caminar y fue reemplazado por Guillermo Vizcarra. Las protestas y encuentros entre los jugadores se saldaron con dos amarillas y Bolivia, tras reanudarse el encuentro, tuvo tiempo para marcar el 1-2 en la prolongación por medio de Miguel Terceros.
Al no haber existido contacto en la acción que pudiera entenderse como falta o infracción, en aplicación de la Regla 9 del Reglamento, el árbitro debe dejar seguir el juego.
Vargas, cuya acción se ha convertido en viral en las redes sociales, al acusarle de sucio y rastrero unos, mientras otros le defienden afirmando que fue profesional con su selección e hizo lo que tenía que hacer, ya se vio implicado en un asunto polémico hace cinco años cuando, en la Liga mexicana, los Tigres vencieron por 1-3 al Veracruz con dos goles en los primeros minutos, del chileno y del francés André Pierre Gignac, cuando el rival se negó a mover el balón como forma de protesta por las deudas que acumulaba el plantel.
Los jugadores del Veracruz habían acordado con los jugadores de Tigres que no tocarían la pelota durante varios minutos, pero la realidad fue muy diferente y marcaron tres goles sin oposición alguna destacando la furia del mundo del fútbol.
Cinco años después, Vargas vuelve a estar en la diana. ¿Sucio o defensor de lo suyo a muerte? El debate está servido.