En su línea habitual, José Mourinho ha vuelto a estar muy duro en rueda de prensa, esta vez tras la derrota sufrida por el Real Madrid contra el Betis en el Benito Villamarín (1-0), y no ha dudado en dejar títere con cabeza.
Una de sus críticas ha sido al calendario, denunciando que el Barcelona ha tenido más descanso entre partido. Así, mientras el Madrid ha jugado en Sevilla tres días después de su empate frente al Manchester City, los azulgranas tienen más tiempo para preparar el duelo de este domingo contra el Levante en el Ciudad de Valencia, donde jugarán cinco días después de ganar al Spartak de Moscú en Champions.
"Es obvio que quien juega el miércoles no debería hacerlo hoy (sábado). Otros controlan el calendario, pero como siempre hablo sólo yo. Como en Manchester del árbitro. Siempre soy yo el malo de la película", denuncia Mourinho.
Pese a todo, el técnico no quiere poner excusas a la derrota en el Benito Villamarín y no duda en criticar la actitud de algunos de sus futbolistas: "Hablamos de profesionales de primer nivel que cuando tienen más fatiga de lo normal deben sacar otras cualidades como la fortaleza mental, el espíritu de sacrificio. Cuando vi a (Radek) Stepanek, a sus 34 años, jugar tres partidos en tres días en la final de la Copa Davis y comprobé que se moría por ganar, por dar una victoria a su país, pensé que hombres de 23, 24 o 26 años pueden jugar perfectamente el miércoles y el domingo. Pero parece que no es así. En el deporte no sólo cuentan las piernas, también hay corazón y cabeza".
También revela Mou que felicitó a los jugadores del Betis por la victoria, "porque dejaron todo lo que tenían, lucharon del primer al último minuto con un espíritu de sacrifico enorme". "Ellos no tienen culpa del gol mal anulado a Benzema ni del penalti claro no señalado en los últimos minutos", destaca el técnico luso, mandando así un recado al colegiado extremeño Gil Manzano. "El Betis jugó mejor que el Madrid y también luchó más. Aunque se benefició de los errores del árbitro, mereció la victoria", confiesa el preparador madridista, que no duda en asumir la culpa de la derrota. "Cuando ganamos, ganamos todos. Cuando perdemos, la culpa la tengo yo. Los jugadores no son culpables", señala.
En cuanto a las opciones del Real Madrid en la Liga con esta derrota -ahora mismo los blancos están a ocho puntos del Barcelona, aunque la distancia será de once en caso de victoria culé en el Ciudad de Valencia, Mourinho apunta: "La pasada temporada teníamos diez puntos de ventaja en marzo y empatando un par de partidos todo se complicó y la Liga se abrió. Probablemente mañana estaremos a once puntos. Y a finales de año, a nueve, trece u once, no a tres o cuatro (...) No hay que ser demasiado optimistas ni demasiado pesimistas. Está difícil, pero yo no consigo centrarme en una única competición, pienso partido a partido. Entiendo que la afición sea pesimista porque es la lectura lógica".