El Madrid tenía un examen serio y lo pasó, pero no lo hizo con nota. Lo hizo más bien jugando a ratos, como el otro día ante el Celta. Lo hizo despachando con desgana a un Espanyol que no es mucha cosa y apenas mereció nada en el partido, que no se acercó apenas a la portería de Diego López. Pero en una de estas va a tener un disgusto el Madrid de Ancelotti. Tiene que cuidar estos partidos que por plantilla debería ganar de goleada, pero que le vale con ganar de manera mísera.
No fue el partido de Cristiano, fue un poco el de Di María, titular ayer, no fue ni de lejos el de Bale, ni el de Xabi ni el de la mayoría de jugadores, pero el Madrid ganó. El gol de Pepe a mediados de la segunda parte bastó pero, ya digo, un día no bastará y tendrá un serio varapalo el bloque blanco.
Partido áspero en el Calderón
Están los tres grandes en tres puntos y todos dependen de sí mismos para ganar la Liga, algo increíble. Todo está así porque el sábado en el Calderón, el partido del año no fue lo que se esperaba. Se diluyó enseguida, como se preveía, en el áspero planteamiento de Simeone. Le vale al Atlético esta forma de jugar. Nadie le va a decir nada al Cholo. Es más, tienen 50 puntos, y nadie auguraba una primera vuelta así, pero es verdad que es un equipo que no es bonito, pero sí intenso y difícil de ganar.
El empate del Calderón le vale más al Atlético que al Barça, aunque estos siguen líderes. Pero el equipo azulgrana se va con un sabor agridulce del partido del Manzanares. Porque Messi y Neymar fueron suplentes, porque este Barcelona no es el de otros años, pero sí que está ahí, sabiendo pelear a otra cosa, a lo que le exigen los rivales este año. Seguramente será criticado Martino por dejar a sus estrellas fuera del partido del año, pero el técnico sabe que con estas decisiones sacará más cosas buenas que malas. Por ejemplo, se ganará al grupo con la confianza que le dio el sábado a los que lo estaban haciendo bien. Es así de sencillo. Y el grupo, con el entrenador, irá hasta el final.
Y para el Atlético el empate no le vale para ser líder, pero demuestra con este encuentro que va a competir por la Liga, que le va a sacar los colores a los grandes, que tienen mucho espíritu. Son grandes noticias para los rojiblancos que, bendito sea para el fútbol, siguen ahí, arriba en la Liga.
Drama en el Betis
Se vio también en la jornada la pequeña resurrección del Rayo, que ganó en Getafe, jugando a otra cosa porque Paco ha acabado claudicando. Es verdad que el trato de balón sigue siendo excelente, pero no le valía a los franjirrojos tocar y tocar hasta la extenuación, crear ocasiones, irse adelante como locos y acabar acribillados a goles. Necesitaba la victoria, pero también necesitaba no encajar gol.
También se vio a un buen Athletic, que goleó al Almería, al Valencia, que perdió una buena oportunidad en Vigo, perdiendo un partido que se le puso muy bien al principio. Y se vio el drama del Betis. Lo del equipo sevillano es de traca, falló un penalti, sufrió una expulsión y está a cinco puntos del equipo que le precede en la Liga. Dramático.