Una goleada para despejar dudas ofreció el Real Madrid a sus seguidores en el debut liguero de los merengues como locales, en un partido marcado por la imperial actuación de James Rodríguez, y los ilusionantes detalles para los aficionados locales de Gareth Bale y Keylor Navas, dos de los hombres en el punto de mira que demostraron ante el Betis que tienen innumerables puntos fuertes por explotar.
Desde el minuto uno, la puesta en escena del Madrid fue arrolladora. A pleno pulmón y a máxima velocidad, tratando de borrar de un plumazo las dudas surgidas tras el estreno sin goles en El Molinón. Y a fe que el resultado no pudo ser mejor, pues antes de dos minutos ya había marcado el primer tanto Bale, aprovechando para borrar las críticas lo antes posible. Una excelente jugada de James por el costado zurdo veía como el certero centro del colombiano era rematado de cabeza por el galés entrando desde atrás a placer mientras la defensa bética parecía estar a otra cosa. Sólo sería el inicio de quince minutos de gran fútbol bajo la batuta de James Rodríguez que parece querer hacerse con los mandos del equipo de Benítez cuanto antes. A lomos del de Cúcuta, Benzema y Cristiano bien pudieron aumentar la renta antes del cuarto de hora, aunque Adán dejó buenas maneras ante ambos en su reencuentro con el Bernabéu.
Tardaría casi veinte minutos en desperezarse el Betis, pues hasta entonces apenas salió de su propio terreno de juego. Aprovecharon los sevillanos el descanso que se tomó James para incordiar en varias ocasiones a Keylor Navas, aunque no tuvo su mejor día Rubén Castro. El canario, siempre efectivo de cara al arco, estuvo demasiado lento en un par de acciones, en las que, primero Sergio Ramos y después un felino Keylor Navas, desbarataron el peligro cuando, especialmente en la segunda ocasión, se cantaba el gol. La acción del costarricense, de gran dificultad saliendo en dos tiempos ante Castro, demostró que el tico quiere demostrar que está preparado para el reto de la portería blanca, y propició que la grada madrileña coreara su nombre, olvidando pasadas rencillas con el guardameta local.
Pero antes de que el Bernabéu loara a Navas, de nuevo James había dejado una obra de arte. Tras salvar Adán en el 36 un buen mano a mano ante Cristiano, una falta de Molinero sobre el luso en la lateral del área, señalada por el asistente tras no verla Hernández Hernández, sería el punto de partida perfecto para una nueva joya del cafetero. El libre directo, en la lateral del área, acabó colándose junto al palo de Adán en una perfecta combinación de potencia y colocación. Cuando todos esperaban un centro, el colombiano se inventó un zurdazo que retumbó en el poste antes de sentenciar el duelo. A partir de ese momento, el Bernabéu sólo tembló cuando Modric, la pieza clave que estabiliza al equipo y le asegura que no se rompa, se resintió de una fuerte entrada en su tobillo, justo antes del intermedio. Pero el croata pudo continuar y, de hecho, volvió tras el descanso, cuando algún augurio parecía indicar lo contrario ya con el 2-0 en el electrónico.
Poca historia habría tras el descanso, pues pese al interés de Benítez en seguir puliendo detalles el interés competitivo se esfumó por la gatera cuando, nuevamente a los dos minutos, Benzema remató a placer un centro de Bale, en una jugada muy parecida al primer gol, tanto por el desarrollo como la pésima oposición de la defensa andaluza. Acto seguido, de nuevo James certificó un partido excelente, y certificó los motivos por los que viste el `10´ en la zamarra merengue, más allá de carreteras en su país natal, cuando terminó sacando una chilena en una jugada embarullada para batir a Adán en el cuarto tanto.
Quedaría tiempo aún para más reivindicaciones, para el regreso de Casemiro como blanco, y para los primeros minutos de Kovacic como local en el Paseo de la Castellana. También para confirmar que Cristiano sigue no ha empezado especialmente fino de cara a meta la temporada, pues tuvo varias y no anduvo fino. Las reclamaciones de importancia las firmaron Navas y Bale. El costarricense volvió a lucirse en un penalti detenido, y retenido, a Rubén Castro, quedándose incluso con el balón y el galés con un zapatazo marca de la casa para cerrar el marcador y marcharse a casa con dos tantos y una asistencia. Al británico no se le podrá pedir que sea un jugador constante, con peso en cada instante, como sí lo son James o Modric, pero no cabe duda de que el de Cardiff es un jugador absolutamente definitorio en los metros finales, y ese es el camino por el que debe crecer en este Real Madrid.
Ficha técnica:
Real Madrid (5): Navas; Danilo, Ramos, Varane, Marcelo; Modric (Kovacic, m. 75), Kroos, James; Bale, Ronaldo y Benzema (Isco, m.52).
Real Betis (0): Adán; Piccini, Pezzella, Bruno, Molinero (Molina, m.45); Xavi Torres, N`Diaye (Petros, m. 81), Cejudo, Vargas; Ceballos (Digard, m. 52) y Rubén Castro.
Goles: (1-0): Bale (m. 2); (2-0): James (m. 39); (3-0): Benzema (m. 47); (4-0): James (m. 50); (5-0): Bale (m. 89).
Árbitro: Hernández Hernández (canario).
Incidencias: partido disputado en el estadio Santiago Bernabéu. Se guardó un minuto de silencio antes del partido por el fallecimiento del ex jugador del Real Madrid, Ángel Atienza.