Corría el año 2008. Ronald Koeman era destituido como entrenador del Valencia. El holandés, que llegó al conjunto de la Capital del Turia en septiembre de 2007 para sustituir a Quique Sánchez Flores, se convertía en el quinto técnico de la era Juan Soler después de Claudio Ranieri, Antonio López, Quique Sánchez Flores y el interino Óscar Fernández.
Koeman, el técnico que peor recuerdo -junto con el ínclito Gary Neville- ha dejado en la ciudad desde que el club fue creado allá por 1919, llevaba al equipo ché a la deriva en la competición doméstica. A pesar de ganar la Copa del Rey días antes ante el Getafe, un 16 de abril y tras perder en Bilbao por goleada, Koeman era destituido fulminantemente. Voro ocupaba su lugar a seis jornadas para el final. El excentral consiguió firmar unos números brillantes: cinco victorias de los seis partidos. Fue irse Koeman y a los jugadores valencianistas se les soltó el corsé. Se quitaron una mochila llena de piedras y, una vez liberados, sacaron a relucir su verdadero potencial. El Valencia termina décimo y salva el mal trago.
Koeman, que jamás superó su traumático paso por el Valencia, tiró, tres años después, una predicción en forma de maldición llena de rencor:
"La Copa que ganó el Valencia conmigo será el único título que ganen en los próximos cinco años", sentenció Ronald Koeman en el mismo vestuario ché el día que fue despedido un 14 de abril de 2008. Tres años más tarde, un 27 de abril de 2011, el técnico tulipán hacía público su maldito pronóstico, extendiendo su maldición en una entrevista.
Koeman, que conocía de primera mano por el presidente Soler las dificultades económicas que atravesaba la entidad de Paterna, quiso hacer daño a un equipo al que le esperaban años de vacas flacas.
Este miércoles 27 de abril se han cumplido cinco años desde la profecía pública de Ronald. El Valencia no ha ganado ningún título en este periodo, ni siquiera después de la llegada de Peter Lim, que consiguió reflotar a los chés con una gran inversión económica. El Valencia, al fin, se ha librado de la maldición de Koeman.
La 'maldición' de Bela Guttman
Si en el mundo del fútbol hay una maldición famosa y que sigue dando que hablar, esa es la que el técnico Bela Guttman lanzó sobre su Benfica.
Las Águilas tuvieron una época dorada a principio de la década de los sesenta. Por aquel entonces, el histórico equipo encarnado hacía doblete en la antigua Copa de Europa: en 1961 derrotando por 3 a 2 al Barcelona de Ladislao Kubala, mientras que en la edición siguiente con una goleada (5-3) sobre el mítico Real Madrid de Di Stéfano y Puskas.
El entrenador del Benfica, Bela Guttman, arquitecto del milagro, solicitó a la directiva del club un aumento salarial para continuar en el cargo. ¿la respuesta de los directivos? Sorprendente. Los ejecutivos del Benfica no sólo se negaron a subir el sueldo de Guttman, sino que ¡lo despidieron!
Tras la sorpresiva salida del entrenador más ganador de la historia del Benfica, Guttman lanzó a regañadientes una maldición que ya superó las cinco décadas y hasta hoy sigue vigente: "Sin mí, el Benfica no ganará un título europeo en 100 años", fueron sus palabras, y desde entonces los portugueses, acumulan ya ocho finales cargadas de frustraciones.
1963: (Champions League) Milan 2-1 Benfica
1965: (Champions League) Inter 1-0 Benfica
1968: (Champions League) Manchester UD 4-1 Benfica
1983: (Copa UEFA) Anderlecht 1-0 Benfica
1988: (Champions League) PSV 6-5 Benfica (Por penales)
1990: (Champions League) Milan 1-0 Benfica
2013: (Europa League) Chelsea 2-1 Benfica
2014: (Europa League) Sevilla (4) 0-0 (2) Benfica (penales)