Insólito caso en el fútbol español. El mejor jugador nicaragüense del momento, Carlos Chavarría, sufrió uno de los peores despertares de su vida. Su sueño, jugar en Primera División de La Liga, se hacía realidad. Su equipo, el Real Estelí, le informaba que había llegado a un acuerdo con el C.D. Leganés -el equipo madrileño jugará en la máxima categoría del fútbol español por primera vez en su historia- para su traspaso. Chavarría se frotaba los ojos.
La prensa de su país estaba convencida de que el destino del jugador era el Leganés. Antes de partir hacía España, el propio Chavarría respondía así a las preguntas que le hacía el Diario La Prensa:
- ¿Está nervioso o ansioso? ¿Qué pasa por su cabeza previo al viaje?
- Nada, no hay nervios ni ansiedad, más que todo contento por seguir haciendo lo mío, mostrando lo que tengo. Me esforzaré para quedarme en Leganés y dejar en alto el nombre de Nicaragua.
- ¿Qué información tiene del Leganés?
- Es un equipo compacto y lo que esperan de mí es demostrar lo que tengo, lo que han visto.
Durante el largo viaje que le llevaría desde su país a España, la cabeza de Chavarría volaba. ¡Jugar contra Messi, Cristiano Ronaldo, Antoine Griezmann, Andrés Iniesta o Iago Aspas! Satisfacción, emoción, inquietud... un cóctel de sensaciones lo invadían.
Chavarría hizo escala en Dallas, y tras más de diez horas, pisó suelo español. Al llegar a Barajas, su sueño terminó de la manera más abrupta posible. Nadie del Leganés le esperaba... En el aeropuerto, la cruda realidad le hizo despertar de golpe. Su nuevo equipo, al menos durante los próximos quince días -estará a prueba- será el Getafe... B. Si sus condiciones convencen a los técnicos azulones, Chavarría jugará en Tercera División.
El volante internacional nicaragüense no se podía creer el varapalo que se terminaba de llevar. Los dirigentes de su equipo, el Real Estelí, insistían en que el destino del jugador era el Leganés, un error difícil de explicar que conllevó un tremendo disgusto a un joven chaval que vio cómo el sueño de su vida, que ya lo sentía real, tendrá que esperar.
Ante la insistencia de Real Estelí y de la prensa nicaragüense de que el destino del jugador era el Leganés, Libertad Digital se ha puesto en contacto con Txema Indias, director deportivo del conjunto pepinero, que cierra, de manera rotunda, el entuerto: "Nosotros no sabemos nada de Carlos Chavarría. Esto ha tenido que ser un error del representante o de algún intermediario, pero el Leganés nunca ha pensado en fichar a Carlos ni hemos mantenido ningún tipo de conversaciones con el Real Estelí, su club de origen".
Ahora, la dura realidad obliga a Carlos a recuperarse rápido del varapalo y demostrar, en quince días, toda su calidad para intentar hacerse un hueco en la Tercera División del fútbol español.