El Málaga ha recuperado la alegría, el juego y los resultados con Míchel en el banquillo. Hace dos meses, el jeque Abdullah al-Thani, con Francesc Arnau como brazo derecho en el área deportiva, decidió destituir al uruguayo Marcelo Gato Romero y encargar el banquillo del club de Martiricos a un hombre con una dilatada trayectoria como entrenador como es Míchel, que llevaba un año en paro tras haber sido despedido por el Olympique de Marsella.
El técnico madrileño cogió al Málaga en decimoquinta posición, peleando por la permanencia en Primera, y su debut resultó aciago al perder contra el Alavés en La Rosaleda (1-2). Los dos siguientes partidos tampoco invitaron precisamente a pensar en el optimismo, con empate sin goles en Butarque ante el Leganés y derrota en casa frente al Atlético de Madrid (0-2), pero todo cambiaría desde entonces.
Tras ganar al Sporting de Gijón en El Molinón (0-1),la eclosión del Málaga se produjo tres días después con la sonada victoria frente al Barça en La Rosaleda (2-0), con una gran actuación del exazulgrana Sandro. Tras ese partido, vuelta a las andadas con la derrota frente al Deportivo de La Coruña (2-0).
Pero Riazor volvería fue un espejismo porque, desde entonces, el equipo blanquiazul ha encadenado cuatro victorias consecutivas: Valencia (2-0), Granada (0-2), Sevilla (4-2) y la última este domingo frente al Celta (3-0), en este último encuentro de nuevo con una actuación estelar de un Sandro Ramírez que ya lleva 14 goles en Liga.
Tras haber logrado la permanencia de forma matemática hace algunas jornadas, el Málaga es ahora undécimo con 45 puntos, 19 de los cuales los ha conseguido en las diez últimas jornadas coincidiendo con la llegada de Míchel al banquillo.
Es decir, con el técnico madrileño como entrenador, los costasoleños han conseguido 19 puntos de 30 posibles al cosechar seis triunfos —cuatro de forma consecutiva—, un empate y tres derrotas.
Si sólo tomáramos como referencia estas diez últimas jornadas de LaLiga Santander, el Málaga sería quinto en la tabla y aspiraría a meterse en puestos de Champions al verse sólo superado por el Real Madrid (25), Atlético (25), Barcelona (24) y Athletic de Bilbao (21).
Y es que los números de Míchel superan con creces a los de sus antecesores en el banquillo del Málaga: Juande Ramos sumó 21 puntos en 16 partidos durante su etapa esta temporada en La Rosaleda, mientras que elGato Romero tan sólo consiguió cinco en diez encuentroscomo entrenador del primer equipo blanquiazul.