Vicente Iborra, al Leicester; Roque Mesa al Swansea; Sandro, al Everton; Kiko Femenía al Watford. La Premier pesca en LaLiga. Jugadores que han tenido un tremendo peso en equipos medios del fútbol español coge las maletas y emigra al Reino Unido.
Los clubes españoles no pueden luchar en millones contra los ingleses. Los derechos de televisión marcan una diferencia abismal. Solo un dato: el colista de la pasada Premier League, el Sunderland, ha cobrado unos 107 millones de euros. En España, solo el Madrid y el Barcelona superan esta cifra.
Con este panorama, la Premier tiene la sartén por el mango. Si se fijan en un jugador de un equipo medio de nuestra Liga, será muy complicado que lo podamos retener en España. Indirectamente, esto favorece a los gigantes. Si en tu Liga la clase media baja el nivel, las diferencias, ya de por si abismales, entre Real Madrid, Barcelona, Atlético de Madrid, Sevilla, Villarreal y Athletic de Bilbao -el Valencia está metido en un jardín lleno de espinos bajo el mandato de Peter Lim-, y el resto no hará más que aumentar.
¿Cuántos futbolistas ingleses juegan en España? Ninguno. ¿Por qué? La Liga exige a los clubes un control económico en el gasto para acabar con las deudas del fútbol español. El dinero para fichajes brilla por su ausencia. La Premier, mientras, echa sus redes en España llevándose, a precio de saldo, producto español bueno, bonito y barato.
De momento, los resultados deportivos enmascaran la realidad. En España los equipos trabajan mucho mejor la cantera, la táctica y exprimen al máximo los recursos de los que disponen. El día que los clubes de la Premier aprendan a maximizar sus recursos...