Sigue la incertidumbre acerca del primer Clásico de la temporada entre FC Barcelona y Real Madrid, previsto en un principio para el sábado 26 de octubre (13:00 horas) en el Camp Nou.
El Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol (RFEF) ha rechazado la propuesta de LaLiga de invertir el orden de los partidos entre azulgranas y madridistas, con el fin de que el primer duelo entre ambos equipos se disputase ese mismo 26 de octubre en el Santiago Bernabéu por motivos de seguridad, debido al clima de tensión que se vive en Cataluña.
Asimismo, Competición daba traslado a Barça, Real Madrid y LaLiga para que antes de las 20:30 horas presentarán alegaciones sobre la posibilidad de aplazar el choque.
La posibilidad que cobraba más fuerza es que el primer Clásico liguero del curso se acabe disputando en el mes de diciembre, en principio el día 4 o el 18. Sin embargo, hay una nueva vuelta de tuerca más: y es que LaLiga ha pedido ahora que el partido se aplace al sábado 7 de diciembre.
Eso afectaría de lleno a la decimosexta jornada prevista para ese fin de semana, ya que obligaría a modificar las fechas y los horarios previstos para esa jornada. Concretamente, se moverían los partidos Barça-Mallorca y Real Madrid-Espanyol. En este sentido, la entidad que preside Javier Tebas ofrece trasladar esos encuentros de azulgranas y madridistas al miércoles 4, lo que garantizaría el mismo descanso para los conjuntos entrenados por Ernesto Valverde y Zinedine Zidane.
El problema está en la otra parte: ¿qué pensarán ahora el Mallorca y el Espanyol al verse implicados de lleno en una polémica que hasta ahora les era ajena?