Gareth Bale vuelve a lesionarse, aunque este nuevo contratiempo sufrido por el galés no le impide ni entrenarse ni jugar, con vistas al partido de la vigésimo cuarta jornada de LaLiga Santander que el Real Madrid disputará este domingo (21:00 horas) contra el Celta de Vigo en el Santiago Bernabéu.
En esta ocasión, el 11 blanco ha sufrido un esguince en el dedo meñique de la mano derecha. Bale aparecía en el entrenamiento de este jueves en la Ciudad Deportiva de Valdebebas con un vendaje en dicha mano que no le impedía ejercitarse con total normalidad junto al resto del grupo.
De esta forma, si no hay más contratiempos en las próximas 72 horas, el jugador de Cardiff podrá jugar el domingo frente a un rival, el Celta de Óscar García Junyent, que ha mejorado notablemente en su fútbol y que viene de ganar el pasado fin de semana al Sevilla en Balaídos (2-1).
Lo cierto es que, aunque Bale no cause baja, esta lesión tampoco ayuda a mejorar el pobre nivel que viene demostrando en los últimos partidos.
El Real Madrid no ha emitido ningún comunicado médico con este nuevo contratiempo del galés, debido a que el futbolista se acogió al principio de la temporada a la ley de protección de datos para que el club no publicase sus informes médicos.
Con este esguince en el dedo meñique en la mano derecha, Bale ya acumula 23 lesiones desde que llegó al Real Madrid en verano de 2013. Hasta la fecha se ha perdido 85 partidos por su estado físico y, después de varios conatos de salida, el galés parece volver a estar más fuera que dentro del equipo. Una vez más.