
Llegaba el Real Madrid en racha al derbi de la capital —más de resultados que de juego—, frente a un Atlético que venía de caer goleado en Mestalla y después de ver cómo la Lazio le empataba en el último suspiro en el estreno en Champions. El Doctor Jekyll y Mister Hyde colchonero, una vez más. Pero esta vez pintaron oros para los de Simeone en el Cívitas Metropolitano, donde se ha impuesto al eterno rival (3-1) para cargarse de moral y meterse en la pelea.
Un triunfo de altos vuelos porque los tres goles del Atlético fueron de cabeza, dos con la firma de Álvaro Morata —el héroe de la noche— y otro de Griezmann. Los rojiblancos ganaban por 2-0 en el minuto 19 y, aunque vieron cómo Kroos acortaba distancias superada la media hora y el Madrid apretaba hasta el descanso, Morata volvía a ver portería nada más comenzar la segunda parte para volver a poner tierra de por medio. Los blancos no arrojaron la toalla y, aunque con más corazón que cabeza, tiraron de ímpetu frente a un adversario que se defendió con orden e intensidad para acabar amarrando los tres puntos.
Doblete de Morata, con un gol al principio de cada tiempo. Tanto el madrileño como Griezmann se encargaron de retratar a una horrible defensa madridista. David Alaba es el principal señalado en los tres goles. Firmó un partido espantoso, pero no fue el único. También los laterales titulares, Lucas Vázquez y Fran García, estuvieron a un nivel muy flojo y el Atlético, especialmente con centros laterales de Samuel Lino —un puñal por la izquierda, el brasileño estuvo soberbio— y Saúl Ñíguez, supo aprovecharlo a las mil maravillas.
En general todo el Atlético estuvo a gran nivel, generando peligro por las bandas, a la contra y también brillando en defensa, frenando casi todas las acometidas madridistas. Un Real Madrid que quiso llevar la voz cantante y que llegó a poner el miedo en el cuerpo a los colchoneros con el gol de Toni Kroos —recortando a Marcos Llorente en la frontal del área grande con un precioso sombrerito y batiendo a Oblak con un gran derechazo—, pero la alegría blanca duró poco. El Atlético pedía a gritos el descanso y el paso por vestuarios le acabaría sentando a Simeone y los suyos como agua de mayo.
Señalados varios jugadores blancos, con Alaba en el centro de la diana, pero también Carlo Ancelotti. Nadie entendió la alineación del entrenador italiano, con una especie de árbol de Navidad (4-3-2-1), dejando a Rodrygo como única referencia en punta, de falso nueve, y a Kroos como pivote. Al igual que el alemán, Modric también fue titular y el croata, al que le pesan cada vez más los años, estuvo perdido en el campo. Incomprensible especialmente lo de Kroos, que jamás puede ser pivote. Pero Carletto se empeñó con sus experimentos y esta vez salió rana.
Quien tampoco pudo brillar fue Bellingham, que venía de salvar los muebles en el estreno europeo ante el Union Berlín con un gol en el 94’, pero esta vez no rascó bola en el Metropolitano. De hecho, el inglés acabó desquiciado y cometió una durísima entrada sobre Ángel Correa en los estertores del derbi. Síntoma de la impotencia tanto del ex del Borussia Dortmund como de todo el equipo madridista.
Ancelotti corrigió su despropósito táctico en la segunda parte, reordenando el equipo tras meter en el campo a Joselu, Tchouaméni (ahora sí había un pivote nato), Nacho y Mendy, pero el Madrid se acabaría estrellando contra un muro. Simeone le ganó claramente la partida a Carletto en el apartado táctico y el Atlético al Madrid en entrega.
Como en todo derbi que se precie, también hubo polémica. El árbitro Alberola Rojas anuló un gol a Camavinga que hubiera supuesto el 2-2 provisional —por fuera de juego previo de Rüdiger, que visto lo visto esta noche debe ser el central titular del Madrid junto a Nacho— y mostró sólo amarilla a Giménez por una entrada demencial a Rodrygo, aunque la acción se produjo pegada a la banda.
Los tres puntos se acaban quedando en el Metropolitano para evitar que el Madrid se escape y los colchoneros acaben prácticamente tirando la Liga en el mes de septiembre. Un triunfo que vale un potosí, dejando a las claras que perfectamente el Atlético de Madrid, si muestra una cara como la de esta noche, perfectamente puede ser un claro candidato al título.
Ficha técnica
Atlético de Madrid, 3: Oblak; Molina (Azpilicueta, m. 64), Savic, Giménez (Correa, m. 85), Hermoso, Lino (Javi Galán, m. 86); Llorente, Koke (Witsel, m. 46), Saúl; Griezmann y Morata (Memphis, m. 82)
Real Madrid, 1: Kepa; Lucas Vázquez (Nacho, m. 55), Rudiger, Alaba, Fran García (Mendy, m. 55); Valverde, Camavinga (Tchouameni, m. 55), Kroos (Brahim, m. 70); Modric (Joselu, m. 46), Bellingham; y Rodrygo
Gol: 1-0, m.3: Morata; 2-0, m.18: Griezmann; 2-1, m.35: Kroos; 3-1, m.46: Morata
Árbitro: Alberoja Rojas (Comité de Castilla-La Mancha). Amonestó al local Giménez (m.46+) y a los visitantes Modric (m.44), Mendy (m.66) y Bellingham (m.93)
Incidencias: Partido de la sexta jornada de LaLiga EA Sports disputado en el estadio Cívitas Metropolitano ante 69.082 espectadores, la mejor entrada de la temporada