El increíble autogol de Rafa Marín en Balaídos: ¿el más surrealista en la historia de La Liga?

Increíble lo que se ha vivido en la tarde de este jueves en el Abanca Balaídos. La parroquía olívica ha visto uno de los goles más surrealistas de los últimos años. El Celta, que llegaba al duelo contra el Deportivo Alavés sin saber lo que era celebrar un gol en su propio campo, se encontraba con uno de los mayores regalos jamás visto en un terreno de juego.

Rafa Marín, canterano del Real Madrid cedido esta temporada al Glorioso, cedía el balón a su portero Sivera en una acción sin peligro alguno. El sevillano daba el pase demasiado fuerte y sin mirar, por lo que no se percató que su guardameta estaba algo adelantado. El balón no lo puede controlar el portero y se cuela irremediablemente en la portería del equipo que entrena Luis García Plaza.

El tanto suponía el primer gol del Celta en su propio estadio y ponía el 1-0 en el marcador. Fíjense como sería el drama para Rafa Marín que Iago Aspas y Bamba, jugadores del Celta, fueron a consolar al central.

En la segunda mitad el Celta se quedó con 10 y el Alavés al menos salvó un punto con el tanto de Omorodion, ex del Granada y que el Atlético se llevó por solo 6 millones de euros que estipulaba su cláusula de rescisión. El delantero nacido en Melilla fue una pesadilla para la zaga del Celta y puso el broche de oro a su enorme actuación con un tanto que al menos lavó el mal sabor de boca del bueno de Marín.

El Deportivo apretó mucho en los minutos finales y estuvo cerca de llevarse una victoria ante un Celta que pagó muy caro el tremendo esfuerzo del pasado sábado en el Camp Nou y que tras la rigurosa expulsión de Luca de la Torre quedó a merced de su rival.