Si fuese un hombre o una mujer jugando al rugby con su perro o con cualquier otro animal de compañía la noticia no habría pasado a mayores en redes sociales, pero nadie se espera abrir su cuenta de Twitter y encontrar de repente a una ballena jugando con un marinero.
Eso pasó en pleno océano ártico entre una beluga y un marinero que entablaron una curiosa relación. Las imágenes están dando la vuelta al mundo ya que no hay constancia de más 'partidos' entre una ballena y un ser humano.