(Libertad Digital) El español Fernando Alonso está donde le corresponde, en el séptimo puesto. Desde que el R28 empezó a mejorar, éste ha sido su objetivo y cumple como un reloj suizo con él. Además de los dos Ferrari y los dos McLaren, esta vez se le ha colado por delante el BMW del polaco Robert Kubica y el Williams de Nico Rosberg, magnífico en la jornada de este sábado.
Alonso se sigue quejando de falta tracción y que el coche no ha ido como esperaban en seco, pero por lo menos está en situación de mañana sumar puntos sin problemas, en condiciones normales y con lluvia aspirar a todo, porque como el mismo ha dicho, en esas condiciones en una lotería y no tiene nada que perder. Sin embargo, estos problemas pueden agravarse si hay agua en la carrera.
Felipe Massa dominó las dos tandas de eliminaciones y acabó llevándose el gato al agua, seguido de su compañero Kimi Raikkonen. Los dos McLaren, Hamilton y Kovalainen, saldrán desde el tercer y cuarto puesto, respectivamente. En esa segunda tanda quedaron fuera Timo Glock, Jenson Button, Nick Heidfeld, Kazuki Nakajima y Rubens Barrichello.
En la primera, la gran decepción volvió a ser Nelson Piquet, el compañero de Fernando Alonso en Renault. Junto a él, fueron eliminados Sebastien Bourdais, Sebastian Vettel -los dos Toro Rosso-, Adrian Sutil y Giancarlo Fisichella, los dos Force India.
Fernando Alonso conseguía pasar a la tercera y definitiva sesión de calificación del GP de Mónaco con el noveno tiempo, cuando todo indicaba que los problemas de agarre lo dejarían fuera de los diez mejores. David Coulthard, décimo, puso el miedo en el cuerpo con un accidente del que ha salido ileso. Su coche golpeó contra las protecciones y dejó suelta una rueda que pudo molestar a alguno de los pilotos. No estuvo en la Q3 y partirá décimo.