L D (Europa Press) "Lo que ha ocurrido no era del todo inesperado. He estado expectante durante bastante tiempo por ver si alguno de los principales fabricantes se viera obligado a retirarse y es que, antes incluso de la actual situación, los costes estaban completamente fuera de control", ha comentado el presidente de la FIA, Max Mosley.
"Y ahora mismo es difícil imaginar que otros equipos puedan subsistir a menos que no realicemos una sustancial reducción de los costes", ha añadido.
Asimismo, Mosley ha indicado que tiene dudas de que los diferentes equipos estén afrontando este tema "de la mejor manera" y ha anunciado que espera tener una reunión con los responsables de las escuderías en los próximos días para discutir este tema.
"Lo que ha pasado es una advertencia muy importante y no creo que ahora haya ninguna duda de que tratar este tema es una verdadera urgencia", ha asegurado el máximo dirigente de la FIA.