Se trata de una tendencia que no ha dejado de crecer durante los últimos años en nuestro país: el servicio de renting de coches por parte de particulares se posiciona líder del mercado mientras que la compra de vehículos se desploma. Y es que el sector del renting de coches facturó 6.300 millones en España tan solo durante 2019, situando las matriculaciones en 302.900 unidades, las cuales suponen un 20% de todos los vehículos matriculados en ese año.
Como dato también a destacar, está el incremento de su uso por parte de los particulares, que ha subido hasta el 57,83% según un análisis del diario económico Cinco Días con hasta 87.191 unidades, convirtiéndose en la opción favorita de los consumidores, que prefieren alquilar antes que comprar un vehículo personal. Este incremento en la nueva forma de adquirir un vehículo por parte de las personas físicas se debe, en gran medida, al esfuerzo realizado por las empresas dedicadas al renting para democratizar un sector que, hasta hace poco tiempo, era exclusivo solo para autónomos y grandes empresas.
Muestra de ello es la aparición de empresas tecnológicas de nueva creación que están apostando por facilitar el acceso a los particulares a un coche de renting a través de la tecnología. Un claro ejemplo de este tipo de compañías es la startup española Vamos, que con un revolucionario proceso de contratación digital permite a los particulares, a través de su móvil u ordenador, eliminar todo el papeleo y acceder a un vehículo de renting en menos de 15 minutos y recibirlo en la dirección que el usuario desee en un plazo de 15 a 20 días.
Razones del auge del renting para particulares
Los particulares ven esta modalidad como una alternativa a la compra clásica, una fórmula antes casi exclusiva del ámbito empresarial. La principal ventaja que los usuarios ven en el renting frente a la compra tradicional es el ‘todo incluido que les posibilita, a cambio del pago de una cuota mensual, no tener que preocuparse por el seguro del vehículo, el mantenimiento, el cambio de neumáticos los impuestos así como las reparaciones.
De esta manera, los usuarios se ahorran tener que comprar el vehículo, financiarlo y preocuparse por su depreciación; al mismo tiempo que dejan de estar pendientes del mantenimiento del mismo. A diferencia de otras opciones, esta modalidad es la favorita de un sector de la sociedad que cada vez busca una mayor flexibilidad y facilidad, pero sobre todo, ahorro en tiempo y en preocupaciones.
Cerca de un 50% de los conductores no está satisfecho con el coche que conduce en sus desplazamientos, según afirma el Estudio sobre la Movilidad del Futuro. "Los resultados de esta encuesta reafirman que la propiedad cada vez está más lejos de ser una prioridad de futuro para los conductores. La tecnología sí lo es. El hecho de que más de un 50% de los conductores declare que prescindiría antes de su coche propio que de su móvil, donde tiene acceso a distintas fórmulas de movilidad, nos da una idea de lo que ya buscan los conductores, pero aún más de cuál va a ser la tendencia en el futuro", explica Tobias Zisik, director general de Europcar Mobility Group España.
En los resultados del estudio anteriormente citado, se refleja que cada vez son más los conductores que prefieren los coches conectados, destacando que la tecnología representa un aumento de la seguridad de sus trayectos, la reducción de las posibilidades de robo de vehículo y un mayor control de posibles averías junto a una conducción más responsable; precisamente las características que los usuarios del renting pueden disfrutar gracias a la posibilidad de poder renovar el coche por otro nuevo cada vez que finalice el contrato.
Otro factor clave en el auge de esta modalidad de adquirir un vehículo es el cambio de mentalidad en parte de la sociedad en lo que al cuidado del medioambiente se refiere. Este cambio de mentalidad, sumado a la guerra contra el diésel, la nueva normativa europea de emisiones que ha provocado el encarecimiento de los vehículos y las restricciones a la circulación para los vehículos más contaminantes, ha provocado que muchos particulares piensen en el renting como la opción perfecta de acceder a un tipo de vehículo que a día de hoy no es apto para todos lo bolsillos mediante la compra tradicional.