L D (EFE) Motta reconoce "haber pasado un momento muy difícil, de debilidad", y se disculpa "por haber fallado a mucha gente". "Quiero pedir perdón a los socios, a los aficionados del club, a mis compañeros y al cuerpo técnico, sobre todo a mi entrenador, que siempre ha estado a mi lado", añade. El jugador no ha tenido problemas en admitir que se equivocó al decidir no acudir a entrenarse con el resto de la plantilla desde el pasado jueves. "Todos hemos cometido errores y seguiremos cometiéndolos, y yo el primero, pero se tiene que ser hombre para cometerlos y también para pedir disculpas", declaraba el azulgrana.
Tamboén ha dicho que quiere "cambiar" y trabajar "aún más duro" si cabe para demostrar que puede jugar en el Barça "muchos años", y ha respondido a aquellos que dudan de su profesionalidad. "Yo lo he dado todo por el club, pero algunas veces se ha dejado entrever como si yo fuera un vividor, y esto no lo puedo permitir, porque siempre he venido a trabajar duro para intentar ayudar al equipo", manifestaba.
Respeto a su ausencia en el entrenamiento del pasado jueves, después tres encuentros seguidos en los que ni siquiera había ido convocado, Motta niega que fuera un acto impulsivo. "No es cosa de un día, es cosa de muchos, había hablado con los técnicos y ellos sabían que pasaba un momento difícil", dice. El centrocampista ha querido aclarar el por qué de su incomparecencia en los últimos días. "Cuando uno no juega y ve que no entra, y quiere demostrarlo y no puede, algunos se pueden sentir débiles y pasar un momento en el que te sientes mal y piensas que a lo mejor no sirves".
En cualquier caso, Motta reconoce que no afrontó el problema de la mejor manera. "Hice lo peor que se puede hacer, que es no acudir al trabajo", subraya el centrocampista azulgrana, quien niega que sufra una depresión. "Ese tipo de cosas las sufres cuando te encuentras en un momento muy crítico. Yo he tenido sólo un momento de debilidad, pero hablé con el técnico y me dio estos días para pensar y reflexionar sobre lo sucedido". El jugador ítalo-brasileño aprovechaba su vuelta a los entrenamientos para charlar de nuevo con Frank Rijkaard y disculparse con sus compañeros. "He hablado con cada uno, todos me han saludado y me han dado su apoyo, pero también me han llamado y enviado mensajes mientras estaba en casa, y este cariño se nota para que uno pueda volver a coger fuerzas", comentaba al respecto.
Tras lo sucedido estos días, Thiago Motta prefería no valorar su posible salida del Barcelona a final de temporada. "El futuro es mañana para mí, y mañana tengo que venir a trabajar muy fuerte, ya que tenemos un final de temporada bastante duro. La Liga está muy igualada y también tenemos la Copa, y hay que trabajar para ganar ambos títulos", concluyó.
Tamboén ha dicho que quiere "cambiar" y trabajar "aún más duro" si cabe para demostrar que puede jugar en el Barça "muchos años", y ha respondido a aquellos que dudan de su profesionalidad. "Yo lo he dado todo por el club, pero algunas veces se ha dejado entrever como si yo fuera un vividor, y esto no lo puedo permitir, porque siempre he venido a trabajar duro para intentar ayudar al equipo", manifestaba.
Respeto a su ausencia en el entrenamiento del pasado jueves, después tres encuentros seguidos en los que ni siquiera había ido convocado, Motta niega que fuera un acto impulsivo. "No es cosa de un día, es cosa de muchos, había hablado con los técnicos y ellos sabían que pasaba un momento difícil", dice. El centrocampista ha querido aclarar el por qué de su incomparecencia en los últimos días. "Cuando uno no juega y ve que no entra, y quiere demostrarlo y no puede, algunos se pueden sentir débiles y pasar un momento en el que te sientes mal y piensas que a lo mejor no sirves".
En cualquier caso, Motta reconoce que no afrontó el problema de la mejor manera. "Hice lo peor que se puede hacer, que es no acudir al trabajo", subraya el centrocampista azulgrana, quien niega que sufra una depresión. "Ese tipo de cosas las sufres cuando te encuentras en un momento muy crítico. Yo he tenido sólo un momento de debilidad, pero hablé con el técnico y me dio estos días para pensar y reflexionar sobre lo sucedido". El jugador ítalo-brasileño aprovechaba su vuelta a los entrenamientos para charlar de nuevo con Frank Rijkaard y disculparse con sus compañeros. "He hablado con cada uno, todos me han saludado y me han dado su apoyo, pero también me han llamado y enviado mensajes mientras estaba en casa, y este cariño se nota para que uno pueda volver a coger fuerzas", comentaba al respecto.
Tras lo sucedido estos días, Thiago Motta prefería no valorar su posible salida del Barcelona a final de temporada. "El futuro es mañana para mí, y mañana tengo que venir a trabajar muy fuerte, ya que tenemos un final de temporada bastante duro. La Liga está muy igualada y también tenemos la Copa, y hay que trabajar para ganar ambos títulos", concluyó.