Menú

Olympiacos acaba con el sueño del Real Madrid en la Euroliga

El Real Madrid ha perdido la cuarta batalla ante Olympiacos (75-78) y con ella su sueño de estar en el Final Four de Berlín. Los blancos acusaron su falta de puntería y llegaron a los instantes finales con un marcador muy igualado que se decantó del lado griego gracias a un triple decisivo de Erceg.

El Real Madrid ha perdido la cuarta batalla ante Olympiacos (75-78) y con ella su sueño de estar en el Final Four de Berlín. Los blancos acusaron su falta de puntería y llegaron a los instantes finales con un marcador muy igualado que se decantó del lado griego gracias a un triple decisivo de Erceg.

L D (EFE) Vistalegre fue una olla a presión desde el primer segundo de juego. Equipo y afición estaban "enchufados" sabiendo lo que estaba en juego y el triple inicial de Mumbrú fue un buen presagio. Sin embargo, Olympiacos no pensaba en ser un convidado de piedra y agarrado a las genialidades de Childress, que demostró por momentos por qué es el jugador mejor pagado de Europa, pasó a dominar el marcador.

La infantería madridista funcionaba bien, pero la artillería blanca tenía el punto de mira desviado. Y aunque la defensa se esforzaba, la falta de tiro exterior dejaba todavía más en inferioridad a un Felipe Reyes que peleaba casi en solitario bajo los aros. Tras el 16-20 del primer cuarto, el Real Madrid decidió cambiar de cuerpo de ejército para el segundo cuarto y dio entrada a la caballería con excelentes resultados.

La defensa dio otro giro de tuerca, se robaron un par de balones y, sobre todo, se encontró el camino del contragolpe, gracias también a la intimidación de Van den Spiegel bajo su tablero. La ausencia de Vujcic, que ni siquiera se vistió, como Pepe Sánchez, ambos por lesión, dejaba a Bourousis con demasiada responsabilidad. El Real Madrid jugó los mejores minutos de la temporada, apoyado por un Palacio de Vistalegre que vibró, y no es una metáfora, como nunca con sus jugadores. La aportación de Winston también fue importante. El 41-33, tras un parcial de 25-13, fue perfectamente esclarecedor de la superioridad de los locales en este periodo.

En la continuación siguieron los problemas de puntería, lo que hizo que un parcial de 4-10 en los primeros cinco minutos volviera a poner el marcador en el filo de la navaja: 45-43. Vistalegre rugió para insuflar ánimo a sus jugadores. Las defensas de los dos equipos se emplearon a fondo y cada balón y cada canasta se encarecieron hasta límites insospechados. Winston salió de nuevo para ayudar a su equipo y consiguió que el Madrid acabara el tercer cuarto dominando el marcador, 58-54.

Que las cosas no iban a ser fáciles era una realidad y el Olympiacos lo demostró al minuto y medio del último cuarto adelantándose por 59-60. Bullock acudió al rescate, también Reyes y Vistalegre siguió rugiendo. A falta de seis minutos, 65-60. A falta de 4, 65-64. A falta de tres y medio, los griegos volvieron a adelantarse, 65-66. A 2,32 para el final y con 67-66, Reyes dejó la pista por cinco personales. Se entró en el último minuto con empate a 70, y a falta de 36 segundos, Erceg, un jugador secundario, clavó un triple en lo más profundo del corazón madridista. Bullock perdió un balón y el Madrid se desangró en los segundos finales.

Temas

En Deportes

    0
    comentarios
    Acceda a los 2 comentarios guardados