El presidente del Barcelona, Sandro Rosell, ha asegurado que Pep Guardiola, que ha renovado como técnico del conjunto azulgrana, "no es el entrenador mejor pagado del mundo", ya que le consta que el sueldo del preparador del Real Madrid, José Mourinho, "está muy por encima".
En una entrevista al programa Efectivament de Esport3, la primera que hace en televisión desde que inició su mandato, Rosell ha comparado a ambos técnicos –"Pep es sentimentalmente del Barcelona y Mourinho profesionalmente del Madrid", ha dicho– y se ha mostrado encantado con la renovación de Guardiola, aunque sólo sea por una temporada. "Me gusta mucho esta fórmula de un año, más uno, más uno para Guardiola, porque la estabilidad no la da lo que pone en el papel del contrato, sino el trabajo, el compromiso y el sentimiento de las personas, y todas estas cosas las tenemos con Pep", ha argumentado.
Sobre otra renovación, la de Dani Alves, Rosell ha asegurado que "pinta bien", pues está convencido de que, "con un tiempo más de reflexión", el lateral brasileño "tomará la decisión correcta", que para él no es otra que quedarse en el Barça.
Precisamente esta es la opción que no ha escogido Joan Miquel Toral, un prometedor centrocampista de la cantera azulgrana que ha aceptado, a sus 16 años, una oferta para jugar en el Arsenal, como en su día hiciera el ahora capitán de los gunners, Cesc Fàbregas. Aunque Rosell espera que la marcha de Toral no enturbie las relaciones con el Arsenal y dificulte el retorno de Cesc al Camp Nou, no ha negado su disgusto con el club inglés. "En la comida de directivas del pasado martes ya les dijimos que, aunque legalmente era correcto lo que habían hecho, nos parecía inmoral. No es un caso aislado, cada día vienen de todo el mundo a intentar quitarnos a nuestros jugadores, pero no pensamos romper nuestra escala salarial para retenerlos", ha subrayado.
El presidente del FC Barcelona también ha hablado de Gerard Piqué y la repercusión mediática que ha tenido su relación con la cantante colombiana Shakira. En este sentido, Rosell cree que "lo importante es que Gerard sea feliz" y "si él es feliz, nosotros también", ha apostillado. No obstante, no se ha atrevido a decir si esta relación sentimental está afectando a su rendimiento en el terreno de juego: "Creo que no, pero eso no soy yo el que lo ha de decir, sino el que manda en el vestuario, que es Pep".