David Ferrer ha alcanzado las semifinales del Valencia Open 500 tras superar a Nicolás Almagro por 6-4 y 7-5, en el duelo español entre el primer y el sexto cabezas de serie del torneo que se resolvió en 1 hora y 23 minutos de juego.
Estos cuartos de final suponían el duodécimo enfrentamiento entre ambos y en todos los anteriores había ganado Ferrer, quien ya había doblegado este mismo año al jugador entrenado por Samuel López en las finales de Bastad y Buenos Aires, así como en dieciseisavos del Masters 1.000 de Madrid.
En esta ocasión, Almagro tampoco consiguió romper tan negativa estadística en un partido en el que fue de menos a más, aunque tuvo que ceder ante la mayor consistencia del juego de Ferrer, que supo contrarrestar y aguantar el agresivo juego del tenista de Murcia, que se jugaba en Valencia parte de sus opciones de poder jugar la Copa Masters.
Ferrer fue el primero en romper las hostilidades y quebró el primer saque del partido de Almagro, lo que le llevó a despegarse con un 3-0 de inicio y jugar con más tranquilidad. Además le acompañó el primer servicio, con unos porcentajes del 75 por ciento, lo que le permitió mantener a raya a su rival, que no dispuso de ningún punto de quiebre, y que acabaría por tanto cediendo la manga en poco menos de media hora de juego, en la que fue muy superior al pupilo de Javier Piles.
Almagro mejoró su servicio en el segundo set, lo que le facilitó jugar con más contundencia y poder dominar más a Ferrer que en la primera manga, igualando más el partido.
Inmerso en una dinámica de juego más positiva, el tenista murciano tuvo su gran oportunidad en el sexto juego, en el que dispuso de un 0-40, que supo corregir Ferrer elevando su nivel de primer saque y aprovechando la precipitación de Nico por querer acortar los puntos.
Tras el susto, Ferrer volvió a servir de maravilla y supo jugar con la ansiedad de Almagro en el undécimo juego para lograr una rotura que resultó definitiva para la suerte del partido y lograr el pase a las semifinales.
Dolgopolov destroza a Granollers
El tenista Marcel Granollers, vigente campeón del Valencia Open 500, no podrá repetir final por tercer año consecutivo tras caer con rotundidad en los cuartos de final ante el ucraniano Alexandr Dolgopolov por 6-0 y 6-2, en poco más de una hora.
El jugador español no se encontró cómodo nunca en el partido ante un Dolgopolov al que le funcionó a la perfección su primer servicio -sólo cedió dos puntos en todo el partido- y que aprovechó el inconsistente juego de Granollers para llevarse con mucha facilidad el encuentro y clasificarse para las semifinales, donde jugará ante el austríaco Jurgen Melzer.
El primer set fue una pesadilla para el campeón. Comenzó el partido perdiendo el servicio, con el que nunca tuvo buenas sensaciones, y desde el fondo de la pista fue el ucraniano el que impuso el ritmo de partido que quiso, sin dejar a Granollers practicar su juego de red.
A la conclusión del primer set, Granollers fue atendido por el fisio en el brazo derecho, aunque a la conclusión del encuentro aseguró que se trataba de un problema que arrastra desde hace un año, pero matizó: "no ha sido un inconveniente hoy".
Un nuevo quiebre de Dolgopolov en el inicio del segundo set hundió un poco más la moral del español, que resistió como pudo hasta que en el séptimo juego, perdió de nuevo su saque y el ucraniano certificó su triunfo.