El mundo del tenis se quedó en shock tras lo que se vivió en la final de la Copa Las Condes. Se enfrentaban la chilena Daniela Seguel y la brasileña Paula Gonçalves. Daniela se imponía por 6-4 y 2-1cuando un verdadero revuelo se organizó en la tribuna. El padre de la tenista chilena se desvanecía y empezaba a echar espuma por la boca. La final se detenía hasta que el padre fue evacuado.
El padre de la "Pantera" fue trasladado a la Clínica UC de San Carlos de Apoquindo donde no pudo ser reanimado del infarto que terminaba de sufrir pese a los intentos de los médicos. El partido se reanudaba e instantes después, Daniela se enteraba de que su padre había fallecido. Con su rival consolándola, los jueces decidieron que la final debía continuar. Increíble. Daniela, destrozada, arrojó la toalla y se retiró con 4-4 en el marcador.
La organización queda retratada
Los organizadores de la Copa de Las Condes están en el punto de mira. Rodrigo Iribarra, médico que atendió al padre de Daniela en la Clínica UD de San Carlos, denunció en unas declaraciones efectuadas al diario El Mercurio, que las medidas que se tomaron para tratar al padre de la tenista no fueron las apropiados.
"No puedo decir que el paciente se hubiera salvado si hubiese recibido el trato adecuado, pero las personas que lo asistieron en ningún momento le practicaron reanimación activa, es decir, no se le aplicó un masaje cardíaco activo".
Además, Iribarra aseguró que Seguel padre "fue traído en una camioneta, un vehículo no apto para transportar pacientes". Por último, Iribarra recalcó la importancia de poder contar con elementos necesarios para poder afrontar situaciones de este tipo en eventos masivos. "En espectáculos masivos debería haber desfibriladores automáticos. Según la familia, el paciente tenía patologías de diabetes e hipertensión. Llegó a urgencia clínicamente muerto, concluyó.