Surrealista la jornada que ha tenido que vivir Garbiñe Muguruza en el Open de Australia donde ya está en la tercera ronda después de ganar a Johanna Konta en tres sets por 6-4, 6-7 y 7-5. El partido fue duro, pero más lo fue jugar de madrugada hasta las 3:12 de la mañana en Australia.
El motivo de jugar tan tarde fue el retraso que tuvo la jornada, pero también hubo un momento fundamental y también escatológico. A cierta hora de la noche se decidió que Garbiñe y su rival jugasen en otra pista para que no tuvieran que enfrentarse de madrugada, pero no se pudo jugar en dicha superficie porque los pájaros habían dejado la pista impracticable debido a sus excrementos.
La organización tuvo que cambiar de idea varias veces y esperar a que otra pista se liberase. Finalmente, Garbiñe ha ganado su partido en el que ha jugado contra su rival y contra los elementos. "Ahora me voy a desayunar", dijo Muguruza tras acabar su partido.