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Rafa Nadal se estrena en el Mutua Madrid Open con victoria ante Auger

Doble 6-3 del español para doblegar al joven talento canadiense Félix Auger-Aliassime. El balear llegaba tocado por un virus estomacal.

Doble 6-3 del español para doblegar al joven talento canadiense Félix Auger-Aliassime. El balear llegaba tocado por un virus estomacal.
Rafa Nadal se estira para devolver una bola al canadiense Auger-Aliassime. | EFE

No logró los respectivos entorchados en Montecarlo y Barcelona y, para añadir aún más dificultad a su debut en el Mutua Madrid Open en la Caja Mágica, un virus atacó su estómago el fin de semana. Además, en su estreno en la pista Manolo Santana apareció delante de él la sombra del talento de Félix Auger-Aliassime. El canadiense, verdugo de Shapovalov en la ronda anterior, se antojaba como una dura prueba para empezar y más con las fuerzas del número 2 del mundo mermadas. ¿Todo ello frenó el hambre de Rafael Nadal? Respuesta sencilla: NO. Así, con mayúsculas.

El estreno del campeón español en las pistas madrileñas fue más sencillo de lo que se podía prever por las diferentes circunstancias que rodeaban al partido ya que ni el contexto ni el rival invitaban a pensar en un debut plácido. Nadal, sin embargo, volvió a demostrar por qué siempre es el favorito cuando la pista se torna rojiza y la tierra batida hace aparición en escena. No fue un choque tan sencillo como refleja el marcador final, pero sí eficaz y muy positivo para coger confianza de cara a las siguientes rondas.

Rafa superó con facilidad a Auger-Aliassime basando su estrategia en un servicio sólido y en un ataque indiscriminado hacia el revés de su oponente. El canadiense nunca estuvo cómodo sobre la misma pista donde el domingo había ganando a Shapovalov y Nadal le fue minando hasta endosarle el doble 6-3 final. El partido fue correcto, no una delicia para los sentidos, pero en los estrenos de Rafa en la Caja Mágica, como él mismo ha reconocido en muchas ocasiones, prima la adaptación y como es lógico la victoria. Sea como sea había que ganar y Nadal ganó con contundencia.

Quizá en el futuro Aliassime pueda plantarle cara a Nadal, pero si quiere hacerlo deberá empezar a responder con consistencia al efecto endiablado que el manacorí infunde a sus golpes. Una de las mejores armas de Félix es su primer saque y en Madrid, ante el rey de la tierra batida, estuvo muy impreciso con su servicio inicial. Nadal no perdona los fallos ajenos ni siquiera cuando el viento no ayuda y sin restar del todo bien logró los breaks necesarios en los momentos más importantes de cada manga. 6-3 y 6-3 para empezar el asalto al título. Superado el primer obstáculo y el virus que intentó sacarle de torneo, Rafa tiene ganas de mucho más.

El segundo rival en Madrid del balear, que busca su sexta corona en la capital de España, será el estadounidense Frances Tiafoe, verdugo del alemán Philipp Kohlschreiber por 6-4, 3-6 y 6-3.

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