El partido estaba igualado a cinco juegos en el tercer set. Murray va a ganar un punto trabajado cuando Fognini pega un grito. Justo grita en el momento en el que el británico va a dar la volea definitivo. Un gesto feo y que no está permitido. Lejos de arrugarse o arrepentirse, el italiano reta a Murray y le dice que no le mire. La pelea continuó luego delante del juez de silla.