L D (EFE) Según informa la agencia holandesa ANP, el banco Belga KBC fue el encargado de tramitar la compra de las acciones de Endemol por parte de Boonstra, el ex presidente de Philips. Según la denuncia oficial presentada por la Fundación para el Control del Tráfico de Efectos, que supervisa la legitimidad de las transacciones de Bolsa, el ex presidente de Philips habría recibido la información de que Endemol sería adquirida por Telefónica a través de su por aquel entonces aún compañera sentimental, Sylvia Toth, que era miembro del consejo de asesores de dirección del grupo de comunicación holandés.
Boonstra, que ha decidido no estar presente durante las vistas de su juicio porque se ve "seriamente afectado" por la publicidad del caso, defiende a través de su abogado, Joost Italianer, que compró las acciones de Endemol por pura intuición. Boonstra compró las acciones de Endemol a través de una sucursal pequeña del banco belga KBC, pidiéndoles a los empleados que mantuviesen "discreción" sobre sus movimientos.
Durante la vista del jueves, se supo que el empleado del banco KBC que atendió la llamada del empresario, inmediatamente después de haber prometido discreción a su cliente, corrió a la cocina de la sucursal, en donde se encontraban sus colegas tomando café, para comunicarles la intención de compra de Boonstra. Según la investigación del Ministerio Fiscal, los ocho empleados de la sucursal de KBC también compraron acciones Endemol después de las transacciones de Boonstra.
Asimismo, el banco habría filtrado esta operación a algunos de sus mejores clientes, los cuales habrían escuchado algo como que Endemol sería adquirida por "algo en España, algo que ver con Internet, con teléfonos y con satélites", según recoge ANP. Sin embargo, el cliente del banco belga KBC dijo en declaraciones posteriores realizadas durante la investigación fiscal que no podía acordarse de cuándo habría escuchado las "conexiones con España" e incluso que las declaraciones sobre tales conexiones nunca habían salido de su boca.
Boonstra, que ha decidido no estar presente durante las vistas de su juicio porque se ve "seriamente afectado" por la publicidad del caso, defiende a través de su abogado, Joost Italianer, que compró las acciones de Endemol por pura intuición. Boonstra compró las acciones de Endemol a través de una sucursal pequeña del banco belga KBC, pidiéndoles a los empleados que mantuviesen "discreción" sobre sus movimientos.
Durante la vista del jueves, se supo que el empleado del banco KBC que atendió la llamada del empresario, inmediatamente después de haber prometido discreción a su cliente, corrió a la cocina de la sucursal, en donde se encontraban sus colegas tomando café, para comunicarles la intención de compra de Boonstra. Según la investigación del Ministerio Fiscal, los ocho empleados de la sucursal de KBC también compraron acciones Endemol después de las transacciones de Boonstra.
Asimismo, el banco habría filtrado esta operación a algunos de sus mejores clientes, los cuales habrían escuchado algo como que Endemol sería adquirida por "algo en España, algo que ver con Internet, con teléfonos y con satélites", según recoge ANP. Sin embargo, el cliente del banco belga KBC dijo en declaraciones posteriores realizadas durante la investigación fiscal que no podía acordarse de cuándo habría escuchado las "conexiones con España" e incluso que las declaraciones sobre tales conexiones nunca habían salido de su boca.