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Castilla-La Mancha se opone a una nueva Zorita pese a que produce la mitad de la electricidad de la región

El vicepresidente primero de Castilla-La Mancha, Fernando Lamata, ha reiterado este viernes la oposición del gobierno regional a la construcción de una nueva central nuclear en el emplazamiento de Zorita, que cerrará definitivamente el próximo 30 de abril tras 38 años de actividad. La central, propiedad de Unión Fenosa, producía el equivalente a poco menos de la mitad del consumo de electricidad de Castilla-La Mancha y fue la primera que produjo electricidad a partir del átomo en España.

El vicepresidente primero de Castilla-La Mancha, Fernando Lamata, ha reiterado este viernes la oposición del gobierno regional a la construcción de una nueva central nuclear en el emplazamiento de Zorita, que cerrará definitivamente el próximo 30 de abril tras 38 años de actividad. La central, propiedad de Unión Fenosa, producía el equivalente a poco menos de la mitad del consumo de electricidad de Castilla-La Mancha y fue la primera que produjo electricidad a partir del átomo en España.
(Libertad Digital) El 14 de octubre de 2002, el Ministerio de Economía concedió la última renovación de la autorización de explotación de la central José Cabrera en la localidad de Zorita, en Guadalajara, y que se cumplirá el próximo domingo 30 de abril. La decisión de que se cierre definitivamente no fue de carácter técnico, ya que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) se mostró favorable a su continuidad. La compañía eléctrica Unión Fenosa, propietaria de la central, había propuesto ubicar una nueva planta nuclear tras el cierre de la actual siempre que se abriera un debate sobre dicha energía en España, pero Fernando Lamata ha mostrado la oposición de la Junta a esa posibilidad.
 
Lamata también ha rechazado que Zorita se pueda convertir en un almacén temporal centralizado (ATC) que albergara los residuos radiactivos de todo el país: "Nos hemos manifestado muy claramente en la oposición a otra instalación" no sólo nuclear, "sino también a un almacén como el que se ha hablado varias veces, aquí", apuntó. Lamata señaló que el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, "siempre lo ha dicho así y así lo ha manifestado al Gobierno de España y al Consejo de Seguridad Nuclear". Y apostilló que "Castilla-La Mancha ya ha contribuido en la generación de energía durante mucho tiempo" y que ese tiempo había concluido.

Por su parte, el consejero de Industria, José Manuel Díaz Salazar, que acompañó a Lamata en la rueda de prensa, calificó de "excelente" el cierre de Zorita y explicó que es el Ministerio de Industria al que compete realizar los trabajos de supervisión. Díaz Salazar destacó la experiencia que va a suponer este cierre, ya que será la primera central nuclear que se clausure de manera programada en España. También se refirió al pacto alcanzado por el Gobierno regional con todos los agentes sociales, políticos y sindicales de la zona para llevar a cabo un Plan de Desarrollo Alternativo que reactivará una comarca en la que -según dijo-, pese a albergar una central nuclear, no ha variado su renta per cápita ni población. Díaz Salazar recordó que este plan supondrá una inversión de 20 millones de euros en diez años, dos millones por año.
 
Planta de ciclo combinado
 
Los alcaldes de Zorita de los Canes, Pastrana y Albalate de Zorita han preferido no dar su opinión sobre el cierre de la central, a la espera de que se abra un debate nacional sobre el tema. Está previsto que a partir de 2009 se construya una central de ciclo combinado, pero el alcalde de Pastrana, el popular Juan Pablo Sánchez, ha declarado que son "bastantes" los regidores de la zona que optarían antes por una nueva central. Sánchez calificó de "tibio" el encuentro mantenido con los responsables de Unión Fenosa y advirtió de que los municipios de la zona se mantendrán expectantes para evitar cualquier proyecto contaminante.
 
El Ministerio de Industria tiene de plazo hasta el mismo 30 de abril para decidir ómo será el cese de explotación y las condiciones para el siguiente periodo, es decir los 3 años que van de 2006 a 2009, en los que se desmantelará la central. En ese período, la actividad fundamental de la central será la carga de contenedores con el combustible irradiado, en su mayoría plutonio.
 
Debate nuclear
 
Este cierre coincide con un creciente interés por la energía nuclear, avivado por varios factores: el crecimiento de la demanda mundial de energía, los altos precios del petróleo, y la política de intentar reducir las emisiones de CO2 a la atmósfera, para que la contribución humana al efecto invernadero, que es ya reducida, lo sea aún más. La energía nuclear no emite gases a la atmósfera, es barata en comparación con otras fuentes de energía y las reservas potenciales de su combustible permitirían un consumo que se contaría en decenas de miles de años. La Asociación Internacional de la Energía (AIE) ha declarado que la nuclear es la única energía que podría garantizar una demanda de energía que va en aumento.
 
Precisamente la preocupación por la contribución humana al efecto invernadero y en consecuencia al calentamiento global es lo que ha llevado a varios ecologistas destacados a defender la energía nuclear como alternativa a la que se basa en la combustión de recursos basados en el carbono. El último ha sido Patrick Moore, fundador de Greenpeace, de la que se ha distanciado con los años por lo que considera una actitud poco científica. El pasado 18 de abril, incluso la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, consideró "muy oportuno" el debate sobre la energía nuclear. También lo ha pedido el Círculo de Empresarios .

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