El número de desempleados registrados en las Oficinas de los Servicios Públicos de Empleo (antiguo Inem) aumentó en 24.318 personas al finalizar el mes de noviembre, un 0,6% más respecto a octubre. De este modo, el paro registrado se situó en 4.110.294, según las cifras oficiales facilitadas este jueves por Trabajo.
No obstante, el aumento de noviembre es el menor incremento experimentado en este mes desde 1998, cuando el paro sólo subió en 2.315 personas. En el mismo mes de 2009 el desempleo se incrementó en 60.593 personas respecto a octubre. Por otro lado, en los últimos 12 meses el número de desempleados creció en 241.348 personas (un 6,24% interanual).
Por sectores económicos, el paro registrado presenta las siguientes variaciones respecto a octubre: en Agricultura sube en 2.437 (1,86%); en Industria se reduce en 1.744 (-0,36%); en Construcción baja en 769 (-0,11%); en Servicios se incrementa en 15.757 (0,66%). Por último, el colectivo Sin Empleo Anterior sube en 8.637 personas (2,43%).
Por su parte, el desempleo de los jóvenes menores de 25 años se incrementa en noviembre en 2.164 personas (0,47%) respecto al mes anterior y el paro de 25 y más años sube en 22.154 (0,61%). Por último, el paro registrado baja en 5, encabezadas por Canarias (-3.580), Extremadura (-2.573) y Madrid (-2.309). Sube, en cambio, en las 12 Comunidades Autónomas restantes, encabezadas por Andalucía (8.517) y Galicia (7.827).
Hasta aquí los datos oficiales que ofrece Trabajo. Sin embargo, a la cifra final hay que sumar la bolsa de desempleados que no son contabilizados por el Gobierno en las listas del Inem, como consecuencia del habitual maquillaje estadístico que se aplica desde 2008. Un mes antes de las pasadas elecciones generales, el ex ministro de Trabajo Jesús Caldera cambió la forma de calcular el paro para maquillar las cifras ante la pérdida de vigor del mercado laboral español.
Desde entonces, Trabajo descuenta de la cifra oficial a los parados que acuden a cursillos de formación, catalogados bajo el epígrafe de "demandantes de empleo no ocupados" (DENOS). El pasado noviembre su cifra ascendía a 256.933 personas. Trabajo, sin embargo, los considera estadísticamente como parados "ocupados".
Además, el Ministerio que dirige ahora Valeriano Gómez tampoco incluye en las listas oficiales a los 256.933 parados agrupados bajo el título de demandantes de empleo con "disponibilidad limitada" o "demanda de empleo específica". Estas personas, según afirma el antiguo Inem, "son aquellos demandantes, sin empleo, que indican en su solicitud condiciones especiales de trabajo". Es decir, que son también parados.
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De este modo, el número real de parados -sumando ambos epígrafes- asciende a un total de 4.599.491 personas. En concreto, 489.197 más que el dato anunciado por Trabajo. Así, España alcanza de nuevo el umbral de los 4,6 millones de parados, 18.792 más que la cifra real (sin maquillaje) de octubre y 94.517 más que el pasado septiembre. La tasa de paro en España se mantiene, pues, muy próxima a la cota del 21%. Según la oficina estadística de la UE, Eurostat, esta tasa se situaba ya en el 20,7% el pasado octubre.
Destrucción de empleo
Por otro lado, España sigue destruyendo empleo. En concreto, la Seguridad Social perdió una media de 54.440 afiliados en noviembre, un 0,3% respecto al mes anterior, con lo que el total de ocupados se situó en 17.612.709 cotizantes, según Trabajo.
Esta bajada mensual es la cuarta consecutiva después de que el sistema perdiera en agosto, septiembre y octubre 113.000, 45.000 y 5.330 afiliados, respectivamente. En los últimos doce meses, la Seguridad Social registra 234.960 cotizantes menos, situándose la tasa interanual en el -1,32%, frente al descenso del 4,67% experimentado hace un año.
Unos datos muy negativos, según el Presidente de la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal (Agett), Francisco Aranda. "A diferencia de lo que expresan fuentes del Gobierno, no se puede decir que la bajada de la afiliación en este mes responda a la estacionalidad, ya que con el dato desestacionalizado la afiliación continúa cayendo en 17.000 personas. Por lo tanto, el factor recesivo, aunque cada vez menor, sigue latente en nuestro mercado de trabajo".
Según Aranda, "es cierto que bien entrado el segundo semestre de 2011 se puede esperar una ligera creación de empleo, pero será incapaz de reducir el elevado número de parados. Los menores ritmos de caída de la afiliación, respecto a años anteriores, responden a un deteriorado agregado total de cotizantes que, como es lógico, no puede seguir disminuyendo de la misma forma que lo hacía en las épocas más duras de la crisis. El ajuste es cada vez menor, lo que indica que podríamos estar cerca de tocar suelo, aunque la recuperación en el empleo todavía está lejana", concluye.