La presencia de Rodrigo Rato, ex director gerente del FMI y ex vicepresidente del Gobierno, en la inauguración del I Congreso de Comercio y Servicios de la Comunidad de Madrid organizado por la Cámara de Comercio madrileña, ha levantado una gran expectación.
La notoriedad pública que ha ganado Rato al calor de su candidatura a presidir Caja Madrid, casi ha logrado desviar la atención de la prensa que parecía buscar más la fotografía con Aguirre e Ignacio González (también presentes en el acto), que los mensajes del ex director gerente del FMI sobre la crisis económica. Pero finalmente hubo mensajes, y muchos.
La ponencia magistral que ha pronunciado Rodrigo Rato, titulada "La sociedad ante la nueva realidad" no ha desviado sus mensajes fundamentales de los que ya lanzara durante su intervención en la reciente presentación de un libro en la que coincidió con otros ministros de Economía de la reciente historia de España, como Solchaga, Boyer y Solbes.
Entonces, y hoy también, Rato ha analizado la evolución de la crisis y los efectos que ha tenido en las distintas economías del mundo. En concreto, se ha fijado en algunos aspectos, como que los indicadores que apuntan a una recuperación económica tienen un patrón muy similar en los diferentes países. Rato se refiere a este fenómeno como una "sincronización que no habíamos visto antes".
Nueva normalidad
Esta sincronización ha venido acompañada, según Rato, de una "reacción pública sin precedentes que ha supuesto una súbita ingerencia del Estado en las economías" y de la acción del G-20 que "ha sido capaz de que exista una respuesta conjunta". Una realidad que al ex director gerente del FMI le sugiere que "éste es el año en el que vivimos peligrosamente", ya que nos estamos acostumbrando a algunos hechos extraordinarios e impensables hace un par de años y que ahora se han convertido en lo que Rato llama una "nueva normalidad".
Para Rato, esta nueva normalidad se observa en que ya "vemos normal" que los gobiernos estatalicen sectores enteros o que los bancos centrales sustituyan al mercado. También que países como Rusia, Brasil o China se conviertan en el destino de todo el ahorro mundial.
Así, lo que inquieta al ex vicepresidente del Gobierno, es la durabilidad de estas nuevas realidades. Entonces, Rato llama la atención sobre una paradoja: las bolsas, entre otros indicadores, hablan de recuperación, pero se trata de "una recuperación sin crédito", ya que el crédito sigue contraído.
Desconfianza
Además, advierte de que esta nueva normalidad "nos conduce a una nueva realidad que es la deuda". En este sentido, recordó que en el inicio de la crisis está la falta de confianza generada por una burbuja en el sector inmobiliario, generada a su vez por unos tipos de interés artificialmente bajos, y la ola de liquidez que esto generó en los mercados.
Por eso, también ha puesto el acento en el deber de los administradores y de la sociedad de preguntarse si el gran caudal de liquidez que mana de los estímulos económicos puestos en marcha (y que el G-20 no quiere retirar de momento), no derivará en una nueva burbuja y, por tanto, en mayor desconfianza.
"No sé si se han fijado ustedes en un dato que a mi me ha llamado la atención", ha dicho Rato, "por primera vez, no se está comprando el oro en papel, sino que se está comprando oro físico". Lo que, a juicio de Rato redunda en una mayor desconfianza.
Por otro lado, el ex vicepresidente del Gobierno, ha recordado que la reacción de los ciudadanos ha sido el ahorro. "En verano han ahorrado el 25% de su renta disponible". Un ahorro que crece paralelo al incremento del paro y la deuda pública.
Enfrentar los problemas
También ha recordado que durante las crisis económicas, las "cosas se aceleran", entre ellas el crecimiento del paro, verdadero acento de nuestra crisis económica. En este sentido, señala que la tarea ahora consiste en descubrir cual es nuestro paro estructural y reducirlo, en el caso de que haya crecido.
Una tarea para la que encuentra algunos problemas Rato. Y es que, tal y como recuerda, "en EEUU si crece el paro, bajan los costes y en Europa no". Y en EEUU el paro baja más rápidamente. Entonces, "lo que tenemos que preguntarnos es si queremos enfrentarnos a los problemas", porque resortes para hacerle frente, tenemos, en opinón de Rato. Y en esto no hay que perder el tiempo, "porque el tiempo es oro y el tiempo es empleo".
Otro de los problemas que debemos enfrentar es que es la primera crisis que sufre España en la que no se puede devaluar la moneda, sino que se está revaluando.
Japón, Portugal o China
Precisamente, ahí es donde radica el problema de nuestra economía para el ex director gerente del FMI. Rato vuelve a advertir de que son necesarias reformas estructurales si queremos evitar "un quinquenio o más tiempo de crecimientos muy tenues como ya pasó a Portugal, Japón o Italia".
La razón es que "tenemos poco potencial de crecimiento. Crisis como estas, provocan que caiga el potencial de crecimiento y nuestros mercados tienen que ganar vigor", dice Rato. Pero, la forma de ganar vigor "no es dejar pasar el tiempo", sino hacer reformas. "Es importante cambiar, y que lo hagamos cuanto antes", ha concluido.