El cantante y actor Tom Waits publicará el próximo 24 de octubre Bad as me, tras siete años sin publicar ningún disco de estudio. El disco lo conformarán 13 canciones, y habrá una edición de lujo en formato doble con tres canciones adicionales más un libreto de 40 páginas.
El primer sencillo del disco, Bad as me, ya está disponible en Youtube y en tiendas digitales. La canción –según su discográfica, Epitaph- abre "con el gruñido inicial del saxo barítono junto a un piano de tango, una línea cubana de guitarra eléctrica, un ritmo gordo (sic) y persuasivo, y las roces rockabilly". El tema preserva las características más típicas de la obra de Waits: una voz ronca y oxidada, vistosas modulaciones vocales y un estribillo reconocible.
El perfil oficial de Waits en Twitter anunciaba en febrero que el artista californiano estaba trabajando en un nuevo álbum: "Buenas noticias. Tom está actualmente en el estudio trabajando en su siguiente disco. Permanece atento", rezaba el ‘tuit’.
En su página web, el lunes apareció un escueto post para empezar a abrir boca de Bad as me: "Hemos escuchado multitud de rumores. ¿Nuevo material de Tom Waits? Visita TomWaits.com el martes 23 de agosto y el propio Tom Waits aclarará las cosas".
El martes, Waits tumbó su propia web y anunció Bad as me con un vídeo humorístico. El cantante interrumpe su música para dirigirse a los espectadores y, más que hablar del nuevo disco, Waits carga contra Internet y se queja de que le ha reventado el nuevo LP: "Vaya, tenemos un problema. Siento que hayamos tenido que cortar, pero parece que ya no existe esa cosa llamada privacidad. Es algo de Internet (...). Pensé que esto iba a ser una fiesta privada para nosotros y que pudierais echar un ojo. Bueno, pues parece que no. Ahora voy a tener que cambiarlo todo. Os lo explico: si es tu cumpleaños y llego demasiado pronto y me empiezo a comer la tarta, abro tus regalos y juego con tus juguetes, ¿te gustaría? O si tu mujer está embarazada y te quiere dar la sorpresa, pero yo te llamo y te digo papi y te estropeo la sorpresa, ¿te gustaría? (...). Ahora voy a tener que repensar todo esto. Ya os informaré de lo que se me ocurre. ¡Jesús! ¡Un par de manzanas podridas y nos lo arruinan todo! Pero esto lo arreglo yo...".