Al hilo de la polémica creada en torno al matrimonio de Lydia Bosch y A.M., el arquitecto ha hecho público un comunicado en el que aporta su versión de los hechos. Responde así tanto a la denuncia por abuso de menores que su mujer presentó el pasado martes -previa, informó, a la demanda de divorcio interpuesta- como a las informaciones posteriores que ha generado este asunto.
Según el documento de su equipo jurídico, tras su "improcedente detención" y "como consecuencia de los comunicados realizados por la representante legal del actor Micky Molina y la defensa de Doña Lydia Boquera de Buen", niegan "rotundamente la veracidad de los hechos imputados", consistentes en "haber besado supuestamente a la menor en la boca hace cinco años".
Por ello, recuerdan "la inmediata puesta en libertad sin fianza" del acusado, así como la "denegación expresa de las medidas cautelares exclusivamente solicitadas por la denunciante", resaltando que dicha denegación fue apoyada por el Ministerio Fiscal.
Además, se asegura que "la constatación de desavenencias entre el denunciado y la madre que, a fecha de interposición de la denuncia, ya se encontraban inmersos en un proceso de divorcio" iniciado por la actriz el pasado 17 de abril. La cadena de sucesos iniciada con la denuncia ha tenido lugar "tras haberse roto las negociaciones encaminadas a la solución consensuada de la crisis familiar".
Por ello, y debido a la negativa de A.M. a "firmar un convenio regulador manifiestamente abusivo", Lydia Bosch interpuso la conocida denuncia. En el comunicado, el equipo jurídico se reafirma en la "presunción de inocencia, motivo por el exigimos que los medios de comunicación no se hagan eco de información no contrastada que perjudica el honor y la imagen" del cliente. Además, "toda vez que existen menores involucrados en las actuaciones judiciales", reclama el "máximo respeto y cautela" a la hora de realizar pronunciarse sobre el tema.
Ante las "patentes agresiones del derecho al honor" motivadas en estos días, anuncian "la interposición de la pertinente querella encaminada a reparar la injusta situación padecida por su cliente y los perniciosos efectos que el atropello de sus derechos ha tenido en un profesional de reconocido y consolidado prestigio".
Igualmente, según el comunicado, "cualquier nuevo ataque a su honor, a la intimidad o la propia imagen de nuestro cliente, sus hijos o su familia, será combatido con firmeza mediante las acciones legales pertinentes".