L. D. / EP.- José María Aznar cerró de golpe este viernes todas las dudas que se habían abierto acerca del futuro político de Rodrigo Rato. En un mitin celebrado en Vigo, el presidente afirmó que Rato "es el mejor ministro de economía de la historia de España". Esta sólida defensa al vicepresidente económico del Gobierno se produjo pocas horas después de que El Mundo publicara que la empresa familiar del vicepresidente recibió un crédito del HSBC, el banco de Gescartera, por una cuantía de 525 millones de pesetas.
Aznar aseguró que se siente "orgulloso" de Rodrigo Rato, de quien subrayó que es "el gran artífice de la política económica del Gobierno", confirmando que seguirá contando con él en su equipo. Asimismo, el presidente afirmó que "algunos señores de la oposición le quieren tocar las narices" pero "lecciones de transparencia no nos las da nadie". Este espaldarazo se hacía más que necesario para el vicepresidente económico, pues en tan solo dos días soportó el peso de una crisis parlamentaria con el PSOE y la publicación de una noticia que afectaba a los negocios de su famila y a su responsabilidad política en el escándalo Gescartera.
El ministro portavoz, Pío Cabanillas ya avanzaba en la mañana de este viernes que ni el PP ni el Gobierno "tienen el más mínimo interés en prescindir de Rato". El cierre de filas ha sido sólido en torno al vicepresidente económico. La prioridad que marcaba Aznar en referencia a que el Pacto por la Justicia fuera respetado a toda costa no ha impedido al presidente afrontar otra prioridad: poner la red bajo la cuerda floja en uno de los momentos más difíciles del ministro de Economía.
Rato dice que no tiene "nada que ver" con el HSBC
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, afirmaba horas antes que no tiene "nada que ver" con la financiación por parte del HSBC de una sociedad de su familia en la que participa pero sobre la que no tiene "ninguna responsabilidad de gestión" desde hace diez años. Según publicó este viernes el diario El Mundo , esta entidad, relacionada con Gescartera, prestó a una empresa de la familia Rato 525 millones de pesetas.
"No tengo nada que ocultar. Es una operación comercial con un banco que debe ser el tercero del mundo y tiene muchos clientes y la empresa de referencia lleva muchos años funcionando, tiene beneficios", explicó Rato, en declaraciones a Onda Cero, respecto a las informaciones de que el HSBC concedió el año pasado un crédito de 525 millones a una sociedad participada por el titular de Economía.
Rato negó que tuviera "nada que ver con esa financiación que, por otra parte, es una financiación de mercado y esa es la única explicación que hay". "El presidente del Gobierno sabe desde que me conoce que mi familia tiene actividades mercantiles y, por lo tanto, tiene créditos y relaciones con el sistema financiero", añadió el vicepresidente segundo.
Aznar sabe de las actividades mercantiles de Rato
Rato reiteró que ni ha negociado ni ha tenido "nada que ver con esa financiación" y calificó de "mala suerte" que el crédito fuese concedido por el mismo banco utilizado por Gescartera y dijo que "así es la vida y sobre todo la política". Explicó que cuando se conoció el caso Gescartera "sabía que esto se sabría" y añadió que lo puso en conocimiento del jefe del Ejecutivo, José María Aznar, aunque precisó que "el presidente del Gobierno sabe desde que me conoce que mi familia tiene actividades mercantiles y por lo tanto, créditos y relaciones con el sistema financiero".
Rato: "No puedo pedir disculpas por decir la verdad"
En declaraciones a la cadena COPE, Rato habló también de la decisión del PSOE de suspender el pacto sobre la renovación de los órganos de Poder Judicial. El ministro de Economía afirmó que no puede pedir "excusas" al PSOE "por decir la verdad" y calificó esta decisión de "infantil", ya que, a su entender, en un debate parlamentario "se dicen cosas dialécticamente contundentes por ambas partes".
Rato añadió que a él los socialistas no le trataron "con guante de seda" y se sorprendió del "grado de debilidad" que demuestra el hecho de que al parlamentario socialista, Jesús Caldera, le "saliera mal" su estrategia, perdiera los estribos y pretenda que todo el mundo mire para otro lado.
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Aznar aseguró que se siente "orgulloso" de Rodrigo Rato, de quien subrayó que es "el gran artífice de la política económica del Gobierno", confirmando que seguirá contando con él en su equipo. Asimismo, el presidente afirmó que "algunos señores de la oposición le quieren tocar las narices" pero "lecciones de transparencia no nos las da nadie". Este espaldarazo se hacía más que necesario para el vicepresidente económico, pues en tan solo dos días soportó el peso de una crisis parlamentaria con el PSOE y la publicación de una noticia que afectaba a los negocios de su famila y a su responsabilidad política en el escándalo Gescartera.
El ministro portavoz, Pío Cabanillas ya avanzaba en la mañana de este viernes que ni el PP ni el Gobierno "tienen el más mínimo interés en prescindir de Rato". El cierre de filas ha sido sólido en torno al vicepresidente económico. La prioridad que marcaba Aznar en referencia a que el Pacto por la Justicia fuera respetado a toda costa no ha impedido al presidente afrontar otra prioridad: poner la red bajo la cuerda floja en uno de los momentos más difíciles del ministro de Economía.
Rato dice que no tiene "nada que ver" con el HSBC
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía, Rodrigo Rato, afirmaba horas antes que no tiene "nada que ver" con la financiación por parte del HSBC de una sociedad de su familia en la que participa pero sobre la que no tiene "ninguna responsabilidad de gestión" desde hace diez años. Según publicó este viernes el diario El Mundo , esta entidad, relacionada con Gescartera, prestó a una empresa de la familia Rato 525 millones de pesetas.
"No tengo nada que ocultar. Es una operación comercial con un banco que debe ser el tercero del mundo y tiene muchos clientes y la empresa de referencia lleva muchos años funcionando, tiene beneficios", explicó Rato, en declaraciones a Onda Cero, respecto a las informaciones de que el HSBC concedió el año pasado un crédito de 525 millones a una sociedad participada por el titular de Economía.
Rato negó que tuviera "nada que ver con esa financiación que, por otra parte, es una financiación de mercado y esa es la única explicación que hay". "El presidente del Gobierno sabe desde que me conoce que mi familia tiene actividades mercantiles y, por lo tanto, tiene créditos y relaciones con el sistema financiero", añadió el vicepresidente segundo.
Aznar sabe de las actividades mercantiles de Rato
Rato reiteró que ni ha negociado ni ha tenido "nada que ver con esa financiación" y calificó de "mala suerte" que el crédito fuese concedido por el mismo banco utilizado por Gescartera y dijo que "así es la vida y sobre todo la política". Explicó que cuando se conoció el caso Gescartera "sabía que esto se sabría" y añadió que lo puso en conocimiento del jefe del Ejecutivo, José María Aznar, aunque precisó que "el presidente del Gobierno sabe desde que me conoce que mi familia tiene actividades mercantiles y por lo tanto, créditos y relaciones con el sistema financiero".
Rato: "No puedo pedir disculpas por decir la verdad"
En declaraciones a la cadena COPE, Rato habló también de la decisión del PSOE de suspender el pacto sobre la renovación de los órganos de Poder Judicial. El ministro de Economía afirmó que no puede pedir "excusas" al PSOE "por decir la verdad" y calificó esta decisión de "infantil", ya que, a su entender, en un debate parlamentario "se dicen cosas dialécticamente contundentes por ambas partes".
Rato añadió que a él los socialistas no le trataron "con guante de seda" y se sorprendió del "grado de debilidad" que demuestra el hecho de que al parlamentario socialista, Jesús Caldera, le "saliera mal" su estrategia, perdiera los estribos y pretenda que todo el mundo mire para otro lado.