En torno a las 16:30 horas la Policía catalana ha recibido una llamada que alertaba de la presencia de una bomba en el Parlamento autonómico. En ese momento se ha activado el protocolo para estos casos y se ha desalojado el hemiciclo, que contaba con pocas personas en su interior.
Tras proceder sin éxito a buscar el artefacto, los Mossos han permitido a los trabajadores volver a sus puestos de trabajo.