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'La Razón' comunica a Mas que "será acogido con gozo en la casa del padre"

La corrupción impregna las portadas de los periódicos mientras continúa el debate sobre lo que hará o no hará Artur Mas.

El Mundo está estupefacto con la operación en Sabadell. "La Fiscalía actúa contra las comisiones del 3%... del PSC". Qué cosas. "Esta fulminante actuación contra las filas de la oposición contrasta con la pasividad mostrada ante los abrumadores indicios de corrupción en el partido gobernante", dice un amoscado Pedro J. A Federico Jiménez Losantos también le huele a chamusquina. "Esta actuación judicial ha tenido muy, muy en cuenta el calendario electoral". Y le pide a Torres-Dulce que tenga la amabilidad de explicarle "por qué no ha destituido al fiscal superior de Cataluña, pese a rechazar públicamente su proclama al estilo castrista, a la vez denuncia, juicio, condena y desmentido injurioso y calumnioso a nuestro periódico".

Pedro J. insiste en que echen a Mas. "Cuanto antes se dé cuenta CiU de que su problema se llama Artur Mas, antes podrá ponerse a trabajar para intentar recuperar la centralidad política (...) Mas se halla en un callejón sin salida. Su permanencia convierte a CiU en rehén de un partido radical y de izquierdas como ERC. Lo lógico sería que presentara su dimisión"... Eso, Pedro J., no decaigas, Dios premia la perseverancia. Santiago González lo explica de maravilla. "Si pierdes un órdago, te levantas y pagas las consumiciones como un señor".

Pero también cuenta El Mundo que PP y CiU han roto peras definitivamente. "Los puentes con el PP son muy frágiles y algunos están rotos, dijo ayer un cabizbajo Duran Lleida".

El País lleva a bombo y platillo lo de Sabadell. Tras haber defendido con uñas y dientes que Mas es un santo varón, a sus antiguos amigos socialistas, ni agua. "Un escándalo de corrupción sacude a altos cargos del PSC tras el descalabro del 25-N". Además parece conocer de maravilla al alcalde de Sabadell y a "su tío Melquíades". "Las nubes que han ensombrecido la gestión de Bustos han sido de todos los tamaños (...) 'Que había algo feo ya se sabía'".

La Razón está convencida de que los catalanes han votado masivamente a CiU y ERC no para que se entiendan, sino para que se lleven a tortas. Y por eso "no es extraño que en la sociedad catana cunda la perplejidad" porque "ERC sea la elegida por CiU como aliada estratégica" para su gobierno. Chico, me pierdo. Así que Iñaki Zaragüeta le dice a Mas que no tenga miedo, que no le dé vergüenza, que Rajoy le espera con los brazos abiertos. "Sé que es muy duro regresar humillado al punto de partida. No hay problema. Puede ilustrarse en la parábola del hijo prodigo (...) Quien por propia voluntad se había pervertido fue acogido con gozo en la casa del padre tras su arrepentimiento". Ya estoy viendo a Mas llorando de emoción y de alivio.

ABC da un golpe en mesa. Está hasta la coronilla de la "España ingobernable". Y es que no ha pasado todavía el susto de Cataluña y viene el País Vasco y "burla al Estado y sí pagará la extra de Navidad a sus funcionarios". Si es que esto es un sin Dios. Ignacio Camacho ve un "sesgado recelo pesimista" en "cierta opinión madrileña" que interpreta las elecciones catalanas como un "triunfo del soberanismo". Él cree que para nada, "los nacionalistas saben  que el domingo embarrancó el proyecto". Así que ahora, pelillos a la mar y que PP y PSOE dejen de desternillarse por los rincones. "Los partidos constitucionalistas no deberían limitarse al lógico regodeo ante el descalabro que Mas se ha infligido a sí mismo. Es muy divertido, tentador, pero poco útil".

La Gaceta rompe con la línea catalana del resto de la prensa y se lanza a la yugular de las cajas de ahorro. "Bochornoso", titula su portada. "Blesa y Hernández Moltó van al Congreso y escurren el bulto". Ya en páginas interiores, el periódico de Intereconomía cuenta que la "burguesía catalana –el alma de CiU, dicen-, quiere cobrase la pieza y viaja a Madrid" porque quieren "cambiar a Mas por Oriol Pujol". Pues nada, nada, nos parece de vicio, pero que lo hagan en Barcelona, que luego la sangre se queda aquí.

Y hay que irse a La Vanguardia para hallar la clave de la repentina operación Sabadell. ¿Creen que se iban a fugar con la pasta? Qué va, pensaban sacar mucha más. ¿Creen que les pillaron ayer? Qué va, les tenía echado el ojo desde hace mogollón. La cosa es que el escándalo "desplazó ayer a un segundo plano las consecuencias de las elecciones". ¡Ángela María!, que decía mi abuela. Córcholis con Mas. Pierde unas elecciones y se lía a meter en la cárcel a diestro y siniestro.

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