Tal día como hoy, 17 de diciembre, pero de 2009, Libertad Digital llevaba en su portada otra de las míticas frases del entonces presidente del Gobierno: "Zapatero en Copenhague: 'La tierra no pertenece a nadie. Salvo al viento". Esta frase la dijo ante el plenario de la Cumbre del Clima en la capital danesa en la que participaba junto a más de 120 jefes de Estado y de Gobierno.
Después de instar a las naciones a pasar de las era energética del carbón y del petróleo a otra basada en el ahorro, la eficiencia y la democratización de la capacidad de producir energía, dijo: "Seamos leales con nuestros pueblos, con nuestros compatriotas. Tenemos que lograr unir el mundo para salvar la tierra, nuestra tierra. Nuestra tierra, en la que viven pobres, demasiados pobres, y ricos, demasiados ricos. La tierra no pertenece a nadie, salvo al viento". Precisamente, sobre el cambio climático llegó a decir que "causa más muertes que el terrorismo internacional".
No era ni la primera ni la última vez que el jefe del Ejecutivo tiraba de locuacidad en un acto público. También se recuerda cuando dijo, al dejar el Gobierno, que "el mejor destino es el de supervisor de nubes acostado en una hamaca". Pero Zapatero sobre todo ha dejado míticas frases sobre economía.
En julio del año 2007 y a pesar de que España empezaba a sufrir la crisis que todavía padecemos, se las prometía muy felices. Por eso, vaticinó que "la próxima legislatura lograremos el pleno empleo". En agosto de ese mismo año aseguró que "España está totalmente a salvo de la crisis financiera". Creía nuestro presidente que "la economía española ha entrado en esta legislatura en la Champions League de la economía mundial" y que "quizá España tenga el sistema financiero más sólido de la comunidad internacional".
Además de alardear de potencia económica mundial, el presidente del Gobierno siempre ha dado muestras de su escaso conocimiento en la materia. Se pudo comprobar en una entrevista en la que aseguró que "el Euribor, el precio que marca las hipotecas, lo marca el Banco Central Europeo". Basta con poner en Google "euribor" para saber que es un índice de referencia publicado diariamente que indica el tipo de interés promedio al que las entidades financieras se prestan dinero en el mercado interbancario del euro. Nada que ver con lo que consideraba ZP.
Por si esto fuera poco, para justificar los nuevos datos del paro de enero de 2008, dijo que "los 130.000 no son parados, sino que son personas que se han apuntado al paro". Dos años después llegó a decir que los desempleados que están recibiendo formación no deben ser considerados parados porque están "trabajando para el país".
Es público y notorio que el presidente del Gobierno negó hasta la extenuación la existencia de la crisis. De hecho, dijo en enero de 2008 que "la crisis es una falacia, puro catastrófico", que "lo de la crisis es opinable", que "la economía ha crecido muy bien en los últimos cuatro años y ahora está en un período de desaceleración, no de crisis y menos de recesión". Ya pasadas las elecciones y con toda la segunda legislatura por delante reconoció que "en esta crisis hay mucha gente que no va a tener ninguna dificultad". Desde el año 2010, desde el Gobierno, con Zapatero a la cabeza se empeñaron en tratar de convencer a los ciudadanos de que "lo peor de la crisis ha pasado ya". Lamentablemente, el tiempo les ha quitado la razón.
Las frases de Zapatero no se han quedado sólo en el campo económico. Sobre ETA dijo que "estamos mejor que hace un año y dentro de un año estaremos mejor que hoy". Al día siguiente la banda terrorista puso una bomba en el aeropuerto de Barajas acabando con la vida de dos personas. Poco después fue tajante al asegurar que "no hay ningún contacto con ETA" aunque luego reconoció que nos había mentido ya que, según él, "autoricé nuevos contactos con ETA tras el atentado del la T4 debido al deseo de instancias internacionales". Por no olvidar que dijo que "Arnaldo Otegi ha hecho un discurso por la paz" y que "Ignacio de Juana Chaos es de los que están a favor del proceso de paz". A pesar de ello, Zapatero desveló su plan para acabar con el terrorismo: "la igualdad entre sexos es más efectiva contra el terrorismo que la fuerza militar".
De Cataluña y España dijo que "apoyaré la reforma del Estatuto que apruebe el parlamento catalán" y que "nación es un concepto discutido y discutible". Sobre la guerra de Irak y de su "no a la guerra" anunció nada más llegar a la Presidencia del Gobierno que "las tropas españolas destinadas en Irak regresarán a casa" y lo justificó más tarde aduciendo que "la paz exige más valentía y más heroísmo que la guerra".