Suma y sigue en su política de chantaje. Por tercera vez en una semana, Luis Bárcenas volvió a actuar contra el Partido Popular. En esta ocasión, ante la Dirección General de Trabajo por "maltrato laboral". La Inspección General del Ministerio de Trabajo ha llamado a declarar a un representante de la formación este jueves para aclarar los hechos.
La semana pasada, bajo orden de la dirección, miembros de la formación entraron en la sala de Génova13 en la que guardaba documentación y la requisaron. Tras denunciar el robo de ordenadores ante la Justicia, ahora protesta por "un atentado a su intimidad como trabajador" del vaciado de lo que él considera su despacho.
El nuevo movimiento de Bárcenas causó estupor en la sede popular. "Esto es un esperpento", se decían, en una guerra que no parece tener fin. Oficialmente, un portavoz autorizado aseguró que "el PP responderá con las decisiones oportunas una vez sea confirmada oficialmente la denuncia del señor Bárcenas".
Además, Bárcenas ya ha demandado por despido improcedente al PP ante los Servicios de Mediación y Actos de Conciliación de Madrid, desmintiendo así la versión oficial, según la cual dejó de trabajar en la formación en 2010. El extesorero reclama ser indemnizado por haber causado baja en el Partido Popular el pasado 31 de enero sin su consentimiento ni autorización.