Carlos Payá, el hermano del fallecido Oswaldo Payá, ha concedido una entrevista a El Mundo donde da detalles sobre el accidente que acabó con la vida del disidente, y la respuesta del Gobierno español ante ello. Payá desvela que no se ha pronunciado hasta ahora porque "en el PP saben desde el minuto uno que no fue un accidente. Nos pidieron que calláramos para no perjudicar a Ángel Carromero, pero ahora ya está aquí", explica. Payá esperaba que Carromero contara lo que ocurrió cuando llegase a España, a lo que el Gobierno respondería desmontando la "farsa judicial".
Pero no ha sido así. Ahora, el también miembro del consejo del Movimiento Cristiano de Liberación (MCL) asegura que "el Gobierno nos propuso aceptar la versión cubana", a través del secretario de Estado de Cooperación Internacional para Iberoamérica, Jesús Gracia. Se reunió con él el día del funeral de su hermano, y le ofreció un pacto: "Nos dijo que si acusábamos a Carromero, él quedaría libre en 72 horas y nosotros recibiríamos una indemnización. Mi contestación fue un no rotundo", asegura. "Me dijo que era la mejor manera de traer a Ángel y que, una vez en España, él podría contar lo que había pasado". Nadie les aclaró quién pagaría esa supuesta indemnización.
Payá se negó porque "si nosotros sabemos que no ha sido un accidente y tenemos pruebas que lo demuestran, ¿cómo íbamos a dar por bueno algo que no es verdad?", explica al diario. No obstante, Payá considera que el Gobierno actuó con "buena voluntad" porque su intención era traer al dirigente de NNGG lo más rápido posible a España.
Hasta septiembre, nadie del Gobierno volvió a ponerse en contacto en MCL. Pero ese mes se celebró en Roma el congreso de la Internacional Demócrata Centro (IDC) que presidía Paya, y al que asistió Mariano Rajoy. El MCL quería pedir, por primera vez, una investigación internacional e independiente que esclareciera el accidente. Pero fueron silenciados y no se incluyó en la agenda. Payá explica que "nos dicen que desistamos de presentar la iniciativa en el congreso porque el Ministerio de Exteriores español no quiere que se haga nada que moleste al Gobierno cubano". Los miembros del MCL se levantaron y se fueron, "a pesar de que teníamos prevista una audiencia con el Papa".
José Manuel García-Margallo se reúne con ellos y les comunica que Ángel Carromero ha aceptado los cargos que le imputan en Cuba, y que cumpliría condena en España. "Yo le replico que delante de la seguridad del Estado cubano uno habla o toca el instrumento que haga falta" a lo que Margallo respondió que "pues que lo hubiera dicho en Cuba porque cuando yo estuve preso en tiempos de Franco no me doblegué".