La ovación sonó más prolongada, más ilusionada que en otros desayunos informativos que, a las nueve de la mañana, despiertan más movimientos mecánicos que sentimientos. El hecho de que la presidenta andaluza, Susana Díaz, no quisiera contar -como es habitual-, con un mandamás del PSOE para presentar su primer desayuno informativo en Madrid ya despertó algún que otro resquemor. Rumores que hablaban de una actitud "presuntuosa" al conocer que la flamante líder andaluza de apenas 38 años se lo había pedido al histórico presentador de TV, Manuel Campo Vidal, moderador de los debates televisivos entre los aspirantes a La Moncloa.
Su discurso, "nuevo, fresco, original", llamó la atención entre los asistentes, "sorprendidos" con una 'chica' a quien presumían "poco fondo político". Más bien al contrario, Díaz se abrazó a la "sinceridad" para lanzar varios misiles a la línea de flotación del PSC y del PSOE de José Luis Rodríguez Zapatero -con innegables implicaciones para Alfredo Pérez Rubalcaba-, en relación al modelo territorial y a los errores que "nunca deberíamos haber consentido" durante la tramitación del estatuto catalán. Presentes, el mismo Rubalcaba y el primer secretario del PSC, Pere Navarro, se quedaron, literalmente, sin palabras.
"Hoy es el día de Susana", dijeron ambos a la salida de la tumultuosa sala del Ritz abriéndose paso entre la prensa. "¿Pero coincide con el discurso de Susana sobre el Estatut?", fue preguntado Rubalcaba por este periódico. "Es el día de Susana, por favor... es su día". De largo también pasó Pere Navarro con la sonrisa forzada de quien es informado de que su "derecho a decidir" no es suyo sino "de todos los españoles".
Quien sí quiso sacar a relucir su entusiasmo ante las cámaras fue el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, quien preguntado por si respaldaba la afirmación de que 'fue un error aceptar cualquier texto que viniera de Cataluña' contestó: "Sin ninguna duda, pero aprovecho para decir que eso y todo lo que ha dicho. Me identifico plenamente. Me ha parecido uno de los discursos más limpios, más nuevos, con reconocimiento de errores propios... un lenguaje absolutamente distinto para un contenido que asumo en su totalidad. Me parece que ha nacido una estrella. Ya lo era en Andalucía, ahora lo es en toda España".
Fue el único que lo dijo, pero no el único que lo pensó o lo comentó en privado. La Susana Díaz que anunció el apoyo de Andalucía a Carmen Chacón en el 38 Congreso del PSOE, podría ser la nueva piedra en el zapato de la dirección de Rubalcaba, el primero en marcharse hoy sin nada que decir.