El Gobierno catalán insiste en dar sobradas muestras de que no se detiene ni ante leyes ni sentencias. Mientras el presidente de la Generalidad replicaba a la sentencia del TC con un elocuente "el proceso continúa", su vicepresidenta, la democristiana Joana Ortega, enviaba una remesa de cartas dirigidas a todos los alcaldes de Cataluña para conocer su "compromiso y colaboración" para organizar la consulta con la consejería de Gobernación y Relaciones Institucionales.
En previsión de que haya alcaldes "refractarios", según la expresión que utilizaba la ponencia golpista de la ANC, la vicepresidenta Ortega les recuerda en la misiva que ya hay fecha, el 9-N, y añade que el Consell Assesor per a la Transició Nacional ha determinado hasta cinco vías legales para celebrar el referéndum, que se ha solicitado el traspaso de la competencia a las Cortes y que se trata, en consecuencia, de una "consulta legal".
Las cartas han sido enviadas este miércoles, un día después de que se conociera el fallo del Constitucional que suspende la declaración de soberanía del parlamento catalán y prohíbe la consulta.