El Mundo resalta el caso francés. "Le Pen lidera el avance de los eurófobos con su 25% en Francia. Auge de la extrema derecha y de los partidos contrarios a la UE". "El PPE gana pero tendrá que pactar con los socialistas", dice como un tema secundario. Muy alarmado, dice El Mundo en un editorial que se trata de "formaciones contrarias a la UE, con alegatos antisistema, que abogan por reducir o prohibir la inmigración e incluso la libre circulación y, sobre todo, ponen en riesgo la unión política". "Los partidos europeístas no pueden obviar su avance", sacude, sino que tienen que "convencer a la sociedad de que pueden trabajar en Europa mediante eficaces políticas sociales y económicas. Es el único camino para cerrar la puerta a las formaciones antieuropeas y evitar una nueva alarma". ¿Está advirtiendo sobre otra guerra en Europa?
"Terremoto político en Europa", titula El País. "Los radicales avanzan en Europa. Victoria del ultraderechista Frente Nacional Francés. El radical antieuropeo UKIP se impone en Reino Unido". No obstante, se aferra el periódico de Prisa a que "la falta de cohesión de los populistas limita su capacidad de acción en la UE". En el Acento, aprovecha el exabrupto del alcalde de Sestao para dar la voz de alerta y, de paso, un serio toque al PNV por apoyar a su alcalde. "Hay que tomar nota del auge del populismo en otras partes de Europa y de la porosidad entre los partidos antiinmigración y los mayoritarios, en vez de promover nuevos caldos de cultivo de la xenofobia".
ABC prefiere centrarse en la exigua victoria de los conservadores. "Juncker esgrime su triunfo frente a Schulz para presidir la Comisión". Ya en el subtítulo da cuenta de que "la ultraderecha vence en Francia y avanza el resto de continente". Dice el editorial que "Europa ha abierto definitivamente las puertas a los extremismos autieuropeos", que han pasado de "lo anecdótico a lo preocupante". Aunque, fiel a su confianza ciega en el bipartidismo dice que populares y socialistas "siguen siendo la médula de la política europea". "La crisis ha impulsado a muchos electores a votar con rabia y buscar chivos expiatorios", dice, aunque señala que eso no explica el caso de Dinamarca, donde la crisis apenas ha dejado efectos. "Las causas no son tan coyunturales". Eso sería "una explicación falsa y peligrosa".
"Giro radical en Europa", dice La Razón. "El tsunami radical sacude a Europa". Dice el periódico de Planeta en un pequeño editorial que "el aumento del voto xenófobo en Europa introduce un elemento tóxico y alarmante en el proyecto común (…) El populismo ha calado y toca desactivarlo y desenmascararlo. Están en juego la libertad, la prosperidad y la convivencia, que esas propuestas ponen en peligro".
La Vanguardia también acude al símil del terremoto. "Seísmo en Europa". Se trata de "un balance más que preocupante por la llegada al hemiciclo de varios grupos euroescépticos, cuando no abiertamente xenófobos que obliga a los dirigentes a una profunda reflexión sobre el futuro", dice el editorial también al borde de un ataque de nervios.