Tras el fracaso de su convocatoria ayer para manifestarse contra la corrupción del PP, a la que solo acudieron unas cien personas entre cargos y militantes de UPyD, Rosa Díez ha pagado su frustración con Ciudadanos. La líder del partido magenta ha arremetido hoy contra el partido de Rivera con inusitada violencia y sin venir a cuento. Ciudadanos, ha dicho Díez en una entrevista en Telemadrid, "es un partído catalán que quiere dar el salto a la política nacional y cuyo único proyecto para España es querer destruir a UPyD".
La líder ha insistido por enésima vez en que no pactará con con el partido de Albert Rivera. Según ella, el proyecto de UPyD "está consolidado" mientras que "los demás tienen que demostrar que tienen algo más en la cabeza que el interés de ser un partido nacional". "Nosotros trabajamos para encontrar soluciones a los problemas de los ciudadanos", ha apostillado al respecto.
En cualquier caso, ha dejado claro que UPyD no pactará con ningún partido "que tenga imputados por financiación ilegal o por corrupción" ni "con nadie que no sea transparente", dice la líder del partido que permitió que desde sus propias filas -el diputado Carlos Martínez Gorriarán- se acusara al entonces eurodiputado de UPyD Sosa Wagner de ser un corrupto. "La exigencia de transparencia es básica", ha destacado, insistiendo en que "da igual las siglas" y en que lo importante es comportarse "a la altura de las circunstancias" ante una ciudadanía que sufre la crisis económica.
Preguntada acerca de las fugas de militantes de UPyD hacia C's, Díez ha evitado pronunciarse al respecto y ha subrayado que el partido magenta y sus ideas "crecen" y se ha mostrado convencida de que van a tener "un gran éxito" en las próximas elecciones autonómicas y municipales de mayo.
Sobre la manifestación de ayer, Díez ha asegurado que, pese a no ser masiva, "cumplió con el objetivo de demandar una norma básica de la democracia" ya que en "una sociedad normal" un partido político "que se financia con dinero negro no puede gobernar". Eso sí, ha reprochado a los partidos de la oposición que no reclamen la dimisión de Rajoy, olvidando que el primero en hacerlo fue Alfredo Pérez Rubalcaba cuando se publicó el SMS de Bárcenas.