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López Aguilar dice que se siente en una situación de "indefensión"

El socialista asegura que "tiene todas las trazas de ser una estratagema" mientras que ella dice que no considera su caso de "violencia de género".

El socialista asegura que "tiene todas las trazas de ser una estratagema" mientras que ella dice que no considera su caso de "violencia de género".
C.Jordá

El exministro socialista Juan Fernando López Aguilar ha asegurado este miércoles que se defenderá de la acusación de violencia doméstica y la ha atribuido a un intento de atacarle "donde más duele, en un perfil público intachable", sin una sola denuncia contra él, ni siquiera de tráfico.

"Se está haciendo daño a una persona cuyo único capital es la honorabilidad, el patrimonio moral que he construido. He trabajado toda mi vida con gran sacrificio, con gran autoexigencia", ha defendido en declaraciones a los periodistas en el Congreso de los Diputados.

López Aguilar ha enmarcado la denuncia en un proceso de divorcio que, según ha dicho, pretendía mantener en el ámbito privado y por el que ya había recibido presiones. Es más, ha relatado que le habían aconsejado "muchas veces" que denunciara las advertencias y la amenaza de que le iban a "destruir literalmente" si seguía adelante con el divorcio.

El exministro ha admitido que para él es un "dolor enorme" el haber sido apartado de sus responsabilidades como eurodiputado y espera poder recuperarlas. No obstante, ha recalcado que no es al PSOE a quien debe convencer de su inocencia, sino demostrarla ante la Justicia.

Como eurodiputado deberá declarar ante el Supremo, aunque ha asegurado que aún no tiene comunicación oficial. Preguntado por si se plantea renunciar para defenderse en la Justicia ordinaria, ha respondido que primero quiere conocer el trámite procesal y qué testigos y documentos puede aportar.

En ese sentido, ha afirmado sentirse en una situación de "indefensión" porque hasta ahora sólo han declarado personas de la familia y del entorno de su exmujer, cuando él tiene una "enormidad" de testigos que le han visto "sufrir" durante el proceso de divorcio, incluso con "enormes dificultades" para acceder a sus hijos.

El exministro se ha referido al suceso que está en el origen de la denuncia, el incendio que tuvo lugar en la casa donde residen su exmujer y sus hijos el pasado 28 de marzo, cuando él estaba en Madrid para asistir al Comité Federal del PSOE.

A su juicio, es "escandaloso" y "tiene todas las trazas de ser una estratagema" que ese episodio, que "comprometió la seguridad" de los niños y podría comprometer su custodia, se desviase hacia un supuesto episodio de violencia de género que presuntamente ocurrió en el pasado, pero que nunca se denunció ni hay parte de lesiones que lo atestigüe.

En declaraciones a La Sexta recogidas por Europa Press, ha relatado que este pasado lunes se puso en contacto con la Policía Judicial para intentar aclarar qué pasó ese sábado, porque en Semana Santa le dijeron que "no estaban operativos los servicios", y que la Policía le dijo que se había derivado a una denuncia de violencia machista. "Si alguna vez esos hechos hubieran tenido lugar deberían haber sido denunciados en el acto", ha recalcado.

López Aguilar ha detallado que fue el segundo incendio en 15 días y que su exmujer estaba "profundamente dormida y en estado de embriaguez" y los niños "profundamente dormidos" mientras crecía la humareda que alertó a los vecinos, que fueron quienes llamaron a la Policía para derribar la puerta.

Para el exministro, es una "profunda injusticia" y "extremadamente doloroso" el "alegato" de que su exesposa "está deprimida por un historial de malos tratos", versión que fue confirmada por las hermanas de ella que acudieron "para proteger a los menores en una situación confusa, con una humareda en casa".

También ha recordado que cuando el hijo mayor de ella le denunció por malos tratos la denuncia fue retirada en menos de 24 horas y ella declaró por escrito que era un "padre ejemplar" y que nunca hubo episodios de malos tratos. Y ha opinado que el perfil de su exmujer, que ha concedido una entrevista, no es el de una mujer maltratada, "alguien que intenta restablecer su vida y el varón no la deja", sino más bien al revés, ya que el caso es el de "un varón que intenta establecer otra vida fuera del matrimonio y la mujer tienen una actuación lesiva al honor de esa persona con perfil público, golpeándole donde más duele".

La exmujer contesta a López Aguilar

Por su parte, Natalia de la Nuez ha afirmado que no considera el suyo un caso de "violencia de género", aunque ha reconocido que se ha sentido maltratada. "Ha habido maltrato, por supuesto", asegura en una entrevista con la agencia Efe, sin querer entrar en detalles. "Prefiero no contestar a eso. Probablemente yo también le he tratado a él mal, pero no estoy hablando de violencia de género ni de nada. Llegamos a una relación en la que no tenía sentido seguir, ha habido faltas de respeto y de consideración".

En la entrevista, confía en que el Tribunal Supremo (TS) archive la causa abierta contra el exministro de Justicia, al que define como "un político brillante", y apunta "que no sería justo que se acabara su carrera por esto".

La exmujer del político grancanario recalca que ella no ha presentado ninguna denuncia contra López Aguilar, ni lo hará "en la vida", y subraya que, aunque fue el ministro que promovió la Ley contra la Violencia de Género, "no deja de ser humano, con sus virtudes y defectos y capacidad para canalizar la rabia y frustración como puede".

Preguntada por el comunicado que el exministro emitió el lunes, en el que López Aguilar habla de una denuncia falsa y de amenazas por parte del entorno de la familia De la Nuez, replica que se equivoca, porque todo comenzó a raíz de unas diligencias policiales tras un conato de incendio que se produjo en la vivienda familiar. "Cuando a mí me convocaron (a declarar), ya habían convocado a todo el edificio. Cuando a mí me llaman, ya habían llamado a mis hermanas. Yo fui la última en enterarme", señala.

Según Natalia de la Nuez, fue el Servicio de Atención a la Familia de la Policía el que activó el protocolo pertinente y comenzó a preguntar a vecinos y familiares sobre lo ocurrido y, posteriormente, la juez del Juzgado de Violencia de Género consideró que había que tomar declaraciones y remitir la causa al Tribunal Supremo, dada la condición de aforado de su exmarido.

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