Tal día como hoy, 9 de abril, pero de 2013, Libertad Digital contaba en su portada la llamativa gestión de una de las fundaciones históricas del PSOE, la Fundación Pablo Iglesias, según las cuentas presentadas y a las que tuvo acceso LD. Esta fundación, presidida por Alfonso Guerra desde el año 1997, contaba en su patronato con lo más granado del PSOE: Elena Valenciano, Zapatero, José Blanco, Caldera, Chaves y Borrell, entre otros, así como el líder de UGT, Cándido Méndez.
Probablemente la caída de actividad en la Fundación Pablo Iglesias se debió a la reducción del flujo de dinero público que permitía la existencia de este tipo de instituciones. De hecho, los ingresos cayeron desde los más de 2,5 millones de euros del año anterior a 1,24 millones. Además, obtuvo 212.000 euros en subvenciones directas de otros organismos públicos como los ministerios de Presidencia, Ciencia e Innovación, así como de la Dirección General del Libro o la Comunidad de Madrid.
De hecho, en el año 2001, la Fundación Pablo Iglesias recibió de parte del entonces presidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, unos 180.000 euros para la digitalización del archivo de más de dos millones de documentos originales del socialismo y el sindicalismo españoles.
De las cuentas desvelados por Libertad Digital, resultó llamativo que, pese a le merma del dinero recaudado, la fundación aumentara sus gastos de personal en 45.000 euros. Esa partida era una de las mayores del presupuesto.
Pero más llamativo resultó el destino de parte del dinero que disponía la Pablo Iglesias. La fundación socialista tenía cuatro vehículos Audi, al menos dos de ellos de alta gama. Se reconoció un contrato de arrendamiento de un Audi A6 por un valor superior a los 40.000 euros. Ese mismo año se adquirió otro A6 por un valor de casi 55.000 euros. Además, en el inventario aparecían otros tres vehículos, aunque uno se dio de baja después de un periodo muy corto de amortización.